Federación Agraria toma distancia del gobierno

El consejo directivo central de Federación Agraria Argentina (FAA) expresó su “enorme preocupación” por varios de los puntos propuestos tanto en el DNU como en el proyecto de ley de desregulación económica que impulsa el gobierno de Javier Milei.

Los federados rechazaron la delegación “eterna” de facultades legislativas al Poder Ejecutivo, el aumento de retenciones, la derogación de la ley de tierras, la adhesión al tratado internacional Upov 91 para la protección de la propiedad intelectual en semillas, la posible privatización de empresas del Estado, la apertura indiscriminada de importaciones que afecta a las economías regionales y aumento desmedido de impuestos provinciales y municipales.

También pidieron que el debate sobre cambios legislativos se realice en el Congreso, con miras a modificar aspectos del paquete legislativo impulsado por el gobierno. Para eso, ya realizan una serie de encuentros con legisladores nacionales.

“Frente a una situación que preocupa por el impacto en los pequeños y medianos productores y las economías regionales, nos convocamos a seguir de cerca las repercusiones en cada uno de los sectores productivos”, advirtió el comité central de FAA.

La conducción de la entidad, que en los últimos años asumió una agenda no tan lejana a la que proponían espacios como La Libertad Avanza, se puso en alerta al ver venir al león en serio. Por eso, si bien aclaran que comprenden “la gravedad de la coyuntura en la que asumió ete gobierno”, también advierten sobre “aspectos específicos” de la normativa impulsada por el gobierno, que generan “enorme preocupación para los federados, a muchos de los cuales los sacarán del sistema”.

La radicalidad neoliberal del programa de gobierno impacta transversalmente a muchos sectores. Por caso, tres entidades de la mesa de enlace agropecuaria salieron a rechazar las modificaciones propuestas en el proyecto de ley ómnibus al actual sistema de protección de la propiedad intelectual de las semillas.

Confederaciones Rurales Argentinas, Federación Agraria Argentina y Sociedad Rural Argentina consideraron “inoportuna la propuesta de adhesión” al tratado Upov 91, y pidieron retirarla del proyecto de ley enviada al Parlamento. “Proponemos proponemos abordar este tema en una actualización integral de la ley de semillas, escuchando y participando todos los sectores que nos vemos involucrados”, dijeron en un comunicado.

Explicaron que la adhesión a Upov 91 implica, entre otras cosas, “la pérdida del derecho de uso propio por parte de los agricultores y la mayor extensión de los derechos de los obtentores”.

“Upov 91 beneficia principalmente a desarrolladores comerciales de variedades uniformes, limitando los derechos de los agricultores para guardar y utilizar semillas y material de propagación”, señalaron en un comunicado. Y detallaron que las características claves de ese tratado incluyen la necesidad de autorización del obtentor para el uso propio, la extensión de derechos hasta el producto de la cosecha (lo cosechado) y una ampliación en la duración del derecho de propiedad.

En América latina, apuntaron, sólo Costa Rica y Perú adoptaron Upov 91, mientras que ningún país de la región está adherido. “Destacamos la importancia de equilibrar los derechos del obtentor con los derechos de los agricultores, señalando que la adhesión limitaría el derecho de uso propio del agricultor y extendería los derechos del obtentorhasta el producto final de la cosech”, subrayaron.