La Feria y Seminarios de las Producciones Alternativas (Fespal) llego a reunir más de 400 empresas y emprendedores que —después de la crisis del 2001— se unieron en el desafió de presentar otras variables productivas y sustentables con valor agregado a supermercados y distribuidores de toda la zona. Fue cuna en la creación de marcas alternativas en salames, quesos, dulces, escabeches, frutas, frutos secos, hongos comestibles, carnes, vinos, licores y otros rubros que se presentaban –de manera directa- del productor al consumidor en pocos pasos.
Fespal: vuelve el municipio productivo
La feria se realizará del 10 al 12 de mayo en Chabás. Fue considera la muestra más importante de la región, que durante una década se proyectó como capital de la producciones alternativas
También, muchos dicen que fue eje en el impulso de los mercados barriales y de productos orgánicos que hoy persisten en muchas ciudades. La antesala de Caminos y Sabores (Buenos Aires), del Mercado del Patio (Rosario) y tantos puntos de ventas de delicatessen que tiene la Argentina.
En su primera década, logró consolidar una marca de indumentaria de la zona en Paraguay, articuló rondas de negocios con empresario de Estados Unidos (Miami) y firmas chilenas. Tuvo acceso con sus productos (alfajores) en los vuelos de cabotaje de Aerolíneas Argentinas, incursionó con una marca de milanesas de soja en varios supermercados de la ciudad de Rosario, con sus frutos en heladerías locales para la preparación del tradicional sabor frutos de bosque y proyecto la concreción de un laboratorio de productos medicinales a base de arándanos, plantas aromáticas.
Por otra parte, en su última etapa productiva logró abastecer de hongos (gírgolas) y otros productos a la reconocida cadena de comidas italianas Slow Food.
Todo esto se logró en un tiempo récord, donde la articulación del Estado y los productores fluía sin interrupciones y consolidaba el crecimiento.
Fueron 10 años entre las 22 ediciones que cumplirá la exposición este 2024, ya que durante los últimos 11 ciclos todo se fue perdiendo sin capacidad para sostener la matriz productiva de una región que había logrado diferenciarse por el ímpetu del desarrollo cooperativo y asociativo de sus emprendedores.
En poco tiempo, el lugar perdió sus producciones, cultivos, plantas de procesamiento de carne de conejos, bio fábricas y su gente. Algunos dejaron la actividad por longevidad y otros porque sintieron la falta de acompañamiento y el desarraigo. Sin embargo, la feria continuó a pesar de haber perdido su principal objetivo.
Este año, entre el 10 y 12 de mayo, se realizará una nueva edición que intenta dar apertura a un cambio y el regreso al marco productivo de sus inicios. El eje intenta ser impulsado por el secretario de la producción comunal y primer presidente de Fespal que vuelve a tomar la posta después de 11 años.
“Hubo un crecimiento significativo que puso a la región entre las 3 ferias más importantes de Santa Fe. Se basó en encadenamientos productivos de desarrollo local y regional, que perdieron sustento cuando los gobiernos le fueron restando apoyo y continuidad”, remarcó el Ing. Héctor Busilacchi, quien agregó que hay que reformular este esfuerzo y volver a potenciar el espíritu emprendedor.
Nuevas ideas
Según el especialista, la actual administración tiene nuevas ideas que buscan poner en valor los proyectos innovativos y productivos que se han renovado y ajustado a estas realidades.
“Estamos dispuesto a volver a recuperar las producciones. Santa Fe apunta a esto y sabe que la zona cuenta con una fuerte presencia de rubros nuevos asociados a las tecnologías en 3D y muchos desarrollos computarizados y electrónicos que acompañan a la industria metalmecánica”, subrayó Busilacchi.
Según Fespal, más allá de los productos gourmet, las legumbres y los granos no tradicionales, la comuna de Chabás, ha realizado un relevamiento que le permitirá llevar a las rondas de negocios a muchas empresas y jóvenes que están apostando a nuevas industrias de aplicaciones, diseño y desarrollo electrónico.
Por su parte, desde la secretaria de la producción han trazado una mirada sobre una zona que potencia el crecimiento de los cultivos extensivos, aunque ha empezado a mostrar la posibilidad de desarrollo en el área de los bio insumos, el agro y la robótica, la inteligencia artificial, lo nuevo e intensivo.