“La mayoría de los productos bajó hasta un 40% su precio en dólares de cara a los nuevos planteos agrícolas y la proyección sigue siendo en esa tendencia”. La afirmación corresponde al Ing. Héctor Vidal, un especialista en esta materia que avisó que el glifosato se puede conseguir hasta un 50% menos en su valor y en comparación con la pre campaña de granos finos del año precedente.
El campo busca aprovechar la rebaja de agroquímicos y fertilizantes
La caída viene desde el lugar de origen (China) y las pocas subas que se registraron durante las últimas 2 semanas fueran transitorias y por problemas impositivos internos ya que en el resto del mundo continúan bajando.
“Es una lástima por las trabas a la importación que seguimos teniendo, así como también el cambio en una percepción de IVA que se vuelve a pagar y hace que no estén estables los valores en el país”, remarcó Vidal agregando que hay un 5 % que da vueltas e impulsa una diferencia para nosotros.
Este empresario, resaltó la disponibilidad de muchas herramientas financieras para pesificar las compras, aunque la distorsión financiera no está permitiendo su aprovechamiento.
Asimismo, reclamó la instauración de un dólar para los insumos o en su defecto que estos se sumen a la diversidad de rubros que ingresan constantemente en el dólar agro.
“No puede ser que se esté pagando un dólar a 300 pesos por productos de exportación y la importación de haga sobre el cambio oficial que se mueve en una conversión menor”, resaltó reconociendo que está transitando un año que no es normal para nadie.
En realidad, lo que se percibe es un productor disperso tras la sequía, donde todo lo supera al tan punto que algunos beneficios pasan casi imperceptibles. Se sabe que no hay semillas para comprar, la mayoría está viendo como refinanciar los alquileres e insumos y eso hace ver que las compras vayan despacio cuando en un momento distinto -por la baja de productos- deberían estar saturados los distribuidores.
“Nosotros venimos recibiendo muchas consultas que van hacia la pesificación de las deudas con alguna tarjeta rural, la plataforma de algún banco, préstamos a 360 días con tasas altas en pesos (100 %) pero mucho más baja que el nivel de inflación”.
Vidal considera que muchos productores que podían tener pesos ociosos van a salir a dolarizarse comprando insumos como resguardo. También estima que muchos están evaluando los ingresos de diciembre por la campaña de trigo y la posibilidad de tomar créditos pesificados que –en el peor de los casos- no te harían perder aún más, sino salir derecho en toda esta maniobra.
Por ahora, los bancos intentan seguir apostando al agro porque lo consideran un segmento pagador y lo que se percibe es un movimiento continuo con las tarjetas agropecuarias. Lo que falta es redondear como se cubren las deudas del año pasado para poder tomar las nuevas herramientas financieras que están un poco trabadas.
A su vez, la receta de los especialistas es pesificar lo máximo que se pueda, aprovechar la brecha cambiaria que en algún momento va a ser equiparada y avanzar con la compra de insumos que hoy muestran al litro de glifosato en 6,5 dólares cuando hace un año valía 12 y a otros herbicidas graminicidas (Cletodim) con una reducción del 15 al 20 %. De hecho en estos días los Haloxifop concentrado pasó de costar u$s 34 por litro para ubicarse en un rango de 29 dólares.