En el marco de la presentación oficial de la puesta en marcha del observatorio de suelos santafesino, expertos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta), presentaron aspectos técnicos y específicos relacionados con la cartografía y mapeo de los territorios provinciales, digitalizados y volcados a un sitio web de acceso público.
Cómo sacar provecho del mapa de los suelos de la provincia
Rubén Tosoloni, de la estación experimental de Rafaela, explicó que para la conformación de la herramienta estatal se tuvo en cuenta la evolución de la cartografía de suelos desde 1965, observando y evaluando cada documento desde un criterio homogéneo, incluyendo no sólo aspectos visuales sino de laboratorio.
La tarea siguiente fue clasificar los suelos "y llegar, para entendernos, a un genérico", acotó Tosolini. El paso siguiente fue la evaluación mediante sistemas internacionales e índices de aptitud. "El final de la historia cuál es: un mapa", simplificó el especialista. Detalló que el básico está conformado por una unidad cartográfica, clase y subclase de aptitud e índice de aptitud del suelo, para el agro.
Su colega, Verónica Sapino, explicó que "el hecho de trabajar a partir de un convenio con catastro permitió unificar criterios y digitalizar cartas anteriores. Por lo tanto, se logró el paso a un sistema más moderno, disponible en Geointa".
Este portal "ofrece herramientas, a la información y a cada una de las series a partir de un link. Allí se pueden encontrar datos analíticos de los perfiles evaluados. Esta es una manera de popularizar el uso de los mapas", concluyó la especialista de Inta Rafaela.
Para acceder a la plataforma digital, se debe ingresar a la URL www.geointa.inta.gov.ar, colocar "Santa Fe" en el buscador del sitio y luego clickear en el link "Mapas de suelos de la provincia de Santa Fe". Una vez ingresado a la página, clickear sobre la imagen, que se abrirá a modo de mapa satelital. De allí en más hay múltiples herramientas para utilizar en el tablero.
Sapino indicó que en el mapeo se pueden encontrar distintos sectores identificados con diferentes colores, que señalan "la capacidad para cultivos agrícolas y también alfalfa, adaptados climáticamente y que por ende no están en riesgo. También se identifica las áreas con mayor aptitud para la ganadería. El resultado del mapa básico, arroja que entre un 30% y un 40% de los suelos santafesinos son aptos para la actividad agropecuaria", de acuerdo a esos criterios.
Asimismo, el sistema ofrece mapas de territorios erosionados. Sapino observó que "prácticamente no hay, salvo en el sur santafesino".
Otro indicador que puede encontrarse es el riesgo de anegamiento, "que incluye caminos, esto a pedido de las comunas, para que puedan ver dónde es conveniente entubar", dijo la especialista. También se mapean los niveles de carbono orgánico. "El objetivo es saber dónde estamos parados", concluyó Sapino.