La siembra de trigo se demoró durante la semana y presenta un retraso respecto a la campaña pasada de 12,9 puntos porcentuales por condiciones secas en el norte del país y excesos hídricos en la región central, informó la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA).
El exceso hídrico puso en pausa la siembra de trigo
En paralelo, la cosecha de soja tardía en el centro y norte de la provincia de Santa Fe avanzó esta semana hasta alcanzar el 87% de la superficie sembrada, con rendimientos muy variados y heterogéneos de acuerdo con las características climáticas de cada región a lo largo de toda la campaña.
La bolsa porteña especificó que los trabajos de implantación del trigo avanzaron 7 puntos porcentuales en los últimos siete días, con lo que se alcanzó a cubrir el 17,1% de las 6,5 millones de hectáreas.
Para la BCBA, en las regiones NOA y centro-norte de Entre Ríos “predominan déficits hídricos que de mantenerse podrían comprometer el cumplimiento de los planteos iniciales de siembra”. En simultáneo, las lluvias de los últimos días dejaron focos de excesos hídricos en sectores del centro-este y sur del área agrícola, aunque “la buena oferta hídrica actual podría alentar la incorporación de nuevas hectáreas en las regiones núcleo norte y sur y centro-este de Entre Ríos”.
En cuanto a la soja, las labores de recolección se encuentran próximos a culminar, con el 96,6% del área apta ya cosechada. Así, con un rendimiento promedio a nivel nacional del 26,9 quintales por hectárea, ya se trillaron 42,4 millones de toneladas de las 43,5 millones que se prevé obtener.
Aún resta por recolectarse poco menos de 550.000 hectáreas en toda el área agrícola, de las cuales 116.000 corresponden a cuadros de primera, con más de un 48% de dicha superficie concentrada sobre el extremo norte del país y más de 430.000 hectáreas de soja de segunda con un 61,5 % del área concentrada sobre el centro y sur de Buenos Aires y La Pampa.
Específicamente en Santa Fe, de acuerdo con el informe semanal que confeccionan el Ministerio de la Producción de la provincia y la Bolsa de Comercio de Santa Fe, en los últimos siete días se logró un avance de 12 puntos porcentuales, lo que permitió llegar al 87% de las 517.000 hectáreas sembradas este año en la zona.
En cuanto a los rendimientos, en la zona norte se dieron los más flojos con mínimos de 8 a 11 quintales por hectárea y máximos de 20 a 24 quintales en los departamentos 9 de Julio, General Obligado, Vera y norte de San Javier. Los rindes mejoran en la zona centro, con mínimos de 10 a 20 quintales y máximos de 28 a 40 quintales en los departamentos San Cristóbal, San Justo, Castellanos, Las Colonias y La Capital.
Por último, la cosecha de maíz progresó 3,2 puntos porcentuales durante la semana y las labores ya avanzaron sobre el 34,1% del as 6,23 millones de hectáreas aptas. Si bien los rindes relevados en los cuadros tardíos se ubican por encima de lo esperado, la entidad bursátil mantuvo la estimación de producción en 46 millones de toneladas, detalló la entidad porteña.
Tendencias
Por otra parte, según datos de la Bolsa de Comercio de Rosario las gramíneas están cada vez más cerca del 1 a 1 con la soja. En la región núcleo, 7 años atrás, por cada hectárea de trigo o maíz se sembraban 4,4 de soja. En el 2021 la relación bajó a 1,4. Y podría bajar más: más localidades señalan un 10% o más de suba interanual en área maicera, indicaron desde la Guía Estratégica para el Agro (GEA).
"Desde su pico máximo en el año 2014/15, cuando la soja se sembraba sobre sobre soja casi sin mediar otro cultivo, a la actual estrategia sembrar 3 cultivos en dos años, de los cuales dos son gramíneas, la agricultura ha cambiado drásticamente en los últimos 7 años en la región núcleo. Y ha sido un cambio favorable que ha hecho más sustentable a la producción y que vuelve a afirmarse: la campaña 2021/22 marcaría el récord de la menor superficie sembrada con soja de los últimos 10 años", señalaron.
Con lo cual la proporción de soja respecto al trigo y al maíz caería a 1,4. O sea, en este año, por cada hectárea de maíz o trigo se sembrarán solo 1,4 de soja, un índice 3 veces menor que el hace 7 años. Y protagonista de este cambio es el maíz, que ya muestra un aumento de un 8% interanual. Pero la gran actividad de la precampaña maicera ya empieza a mostrar que el área incluso puede crecer más. También, otro pequeño cultivo que gana de a poco terreno y suma al equipo de las gramíneas es el sorgo.
La campaña más sustentable de la década
En la región núcleo, para la campaña 2021/22 se espera un incremento anual de 137 mil ha de maíz (+8%), 50 mil ha de trigo (+2,5%) y una caída de soja de 100 mil ha (-2%), detallaron desde GEA. Pero, ¿por qué el aumento de gramíneas es tan importante para hacer a la producción más sustentable? Hace algunos años, cuando dominaba la soja en el paisaje de la región, la falta de rotación incentivaba la aparición de malezas resistentes, pérdida de fertilidad de los suelos y de biodiversidad. El quiebre de esta tendencia fue en la campaña 2016/17. A partir de allí, los incentivos comerciales acompañaron la adopción de lo que es la práctica más eficiente a mediano plazo para el control de malezas, plagas y cuidado del suelo: la rotación de cultivos.
"Hay una gran actividad de compra de semillas de maíz", indican en el centro sur de Santa Fe, donde ya estiman un incremento del 10 al 15% del área intencionada, respecto a la del año pasado. En el sur de Santa Fe, también destacan una fuerte inversión en híbridos de maíz y la superficie podría aumentaría un 10%. En Colón, en el noreste bonaerense, también aumentaría el área con gramíneas pero impulsada principalmente por el maíz. Allí, estiman un incremento de un 5 a 10%, precisó GEA.
“Nadie afloja, se está haciendo un gran esfuerzo para sembrar la mayor cantidad de lotes posibles antes de que se vaya la humedad”, resumen los técnicos esta semana. Ya se sembró un 30% del total de trigo a implantar. Por un lado se hace todo lo posible por no perder oportunidad de siembra en ningún lote, pero también hay excesos hídricos que complican el progreso de la siembra. Esto sucede por ejemplo en noreste bonaerense: en Colón solo se implantó solo el 5%, en General Pinto, un 7%.
GEA señaló que el año pasado, la carrera contra la desecación hizo que se adelante la siembra de los ciclos largos e intermedios. En esta misma fecha, la región llevaba sembrada la mitad del área intencionada. En cambio, en este 2021 el centro sur santafesino lleva implantado solo un 25% del área. Hacia el sur de Santa Fe, la humedad de siembra es óptima y el progreso es de casi el 30%. El sudeste de Córdoba lleva un gran avance. Marcos Juárez logró plantar el 75% del trigo. Pero hacia el oeste y norte cordobés, la siembra se vio suspendida por la falta de humedad: allí hacen falta 20 a 40 mm. Y esto junto a la menor disponibilidad de semillas de ciclos cortos hace tambalear los planes de siembra. Los ingenieros de Las Varillas advierten que, “si no llueve antes del 15 de junio, el área de siembra triguera puede caer un 30%”.