Commelina erecta, conocida con el nombre de Flor de Santa Lucía, es una especie perenne, herbácea, que se reproduce a partir de semillas y de rizomas. Es una monocotiledónea que puede confundirse con una gramínea, pero que en realidad pertenece a la familia Commelinaceae. Según la Red de malezas de Aapresid (REM), esta maleza tolerante a glifosato aumentó su presencia en los lotes casi un 30% en los últimos años.
Malezas: crece la presencia de la flor de Santa Lucía
El periodo de emergencia ocurre desde fines de octubre hasta los primeros días de febrero. Por supuesto que la dinámica varía año a año, según regiones, cultivo antecesor y nivel de cobertura, entre otros, por lo que el monitoreo sigue siendo la práctica indiscutible para un buen manejo.
La capacidad de propagarse tanto por semillas como por rizomas, hace que a la emergencia de plántulas desde semillas se sume el rebrote de rizomas a inicios de primavera. Para peor, las plantas que emergen de los rizomas tienen e mayor rusticidad, , fecundidad, tasas de crecimiento y tolerancia a herbicidas.
Esta especie es tolerante al glifosato. Esto significa que, a diferencia del fenómeno de resistencia, Commelina nunca presentó susceptibilidad a este herbicida.
Con la incorporación de soja resistente a glifosato, este herbicida se convirtió en la principal herramienta para el control de malezas, provocando el aumento en la presión de selección e incrementando la frecuencia de individuos tolerantes, haciendo más difícil su control.
Según los mapas de presencia de malezas resistentes y tolerantes que genera cada dos años la REM, la Flor de Santa Lucía presentó un crecimiento en superficie entre 2013 y 2021, pasando de estar presente en 117 a 164 departamentos , es decir en más del 80% de los departamentos encuestados.
Debido a su gran capacidad para persistir y colonizar nuevas áreas, es imprescindible buscar herramientas complementarias al control químico y pensadas a largo plazo.