“El mercado interno de lácteos está muy bien abastecido pero con pocas posibilidades de incrementar su consumo”, confió a este periodista el presidente del Centro de la Industria Lechera, Ércole Felippa, como prolegómeno de las preocupaciones que tiene la cadena en un mes tan particular.
Octubre, un mes bisagra para la industria láctea
Octubre es a la lechería lo que mayo es a la soja, porque el sector suele inquietarse ante el pico de producción estacional, donde el precio se define en función de la colocación que el sector industrial pueda hacer de la mercadería excedente, en un contexto interno tan inestable como complejo, con inflación e incremento de costos y acuerdos de precios por renovarse.
A este escenario de incertidumbre hay que sumarle la inminente negociación de la segunda parte de la paritaria con el sindicato de los lecheros, Atilra, que si bien este año no ha sido conflictiva, supone en la previa un ineludible reajuste por inflación, en medio de una situación de tensión por la crisis de SanCor, que el gremio pretende trasladar a todo el arco industrial para forzar una solución en su favor.
En este berenjenal, la industria mantiene a raya el precio al productor por segundo mes consecutivo. Según consultas realizadas a algunas grandes empresas de la cuenca santafesina, el valor de la materia prima seguirá por octubre entre 32 y 33 $/litro, todavía por encima del ritmo inflacionario y suficiente para cubrir los costos de producción con un pequeño margen de rentabilidad (3,3% según el Ocla).
“Si nosotros analizamos el comportamiento del precio de la materia prima en términos anuales, se incrementó más de un 70%, y si bien ahora se detuvo, cuando la materia prima ronda los 30 a 32 centavos de dólar en términos reales, creo que es difícil que siga aumentando”, argumentó Ércole Felippa. “En un contexto inflacionario como el que vivimos, mantener el precio significa de alguna manera una baja –reconoció el industrial-, porque queda atrasado con respecto al resto de los costos”. Y aclaró: “estamos entrando en un período de mayor estabilidad de precios por la estacionalidad productiva; sin perder de vista que en una economía estable, en la primavera el precio real de la leche suele bajar”.
Lo cierto es que la producción nacional continúa con un buen ritmo de crecimiento, 4,3% acumulado, que hace prever, una vez pasado este pico de octubre, un incremento anual que estará cerca de un 3% al final del año.
El contexto político
“Espero que todo se encarrile rápidamente, porque no podemos darnos el lujo en el país de tener este tipo de crisis autoinflingidas, que si bien son parte del juego democrático, hacen ruido y perjudican al sector productivo, la economía y la gente, porque la economía funciona por expectativas”, opinó Felippa sobre este particular interregno electoral que provocó entre otras cosas, el cambio del ministro de Agricultura y Ganadería (Lechería incluída). “No me imaginé que uno de los fusibles fuera el ministro [Luis] Basterra, con quien teníamos un excelente diálogo como sector, aunque seguramente lo sigamos teniendo con Julián Domínguez, porque la premisa es construir consensos y acuerdos, lo cual es muy útil para nosotros”, analizó el presidente del CIL.
Como ejemplo, Felippa rememoró el acuerdo de precios y abastecimiento que la industria láctea realizó “a tiempo” con el Gobierno, lo que les permitió evitar una intervención al mercado exportador allá por abril/mayo de este año. “Basta mirar lo que le pasó a otras actividades primarias [como la carne], mientras nosotros en base a acuerdos que fuimos logrando en nuestro sector, pudimos transitar un camino sin ningún tipo de conflictos”, destacó el industrial.
A renovar para seguir exportando
En efecto, el acuerdo alcanzado con la Secretaría de Comercio Interior, por el cual se vuelcan mensualmente al mercado interno 30 millones de litros equivalentes en productos con Precios Cuidados, vence este mes y la industria ya fue anoticiada por el Gobierno para continuarlo, aunque todavía no hay fecha para la reunión.
“El compromiso del Gobierno fue ir deslistando los demás productos para ir saliendo del esquema de Precios Máximos, lo que nos permitió recuperar el atraso de precios en muchos productos que durante 2020 estuvieron prácticamente congelados”, explicó Felippa. “Si analizamos los últimos 12 meses la inflación minorista (precios al consumidor), estuvo por arriba de la media de inflación, pero cuando esa misma comparación se mide un año atrás, vemos que recién ahora se alcanzó ese nivel, porque durante muchos meses los precios de los lácteos estuvieron muy atrasados; es más, esos mismos parámetros medidos en precios mayoristas (a salida de fábrica) todavía existe una brecha con la inflación que no hemos alcanzado”.
El presidente de los industriales anunció además, que “el acuerdo de precios, que sigue funcionando bien y con los volúmenes comprometidos que están disponibles en nuestras empresas, ahora en octubre hay que renovarlo, y deberemos sentarnos con la Secretaría de Comercio Interior para acordar los precios para los próximos tres meses”. Por otra parte, “los demás productos que se fueron deslistando de precios máximos [que son los que más aumentaron en 2021], el Gobierno nos permite ciertos aumentos, aunque no los que quisiéramos, porque además, el mercado no está en condiciones de absorberlos debido al deterioro del poder adquisitivo que genera la inflación”, comentó el titular del CIL.
Exportaciones todavía positivas
El acuerdo con el Gobierno es fundamental para la cadena láctea debido a que la única alternativa para no presionar los precios internos con una sobreoferta en este mes tan particular, es mantener activos los niveles de exportación, para lo cual es imprescindible evitar una intervención oficial sobre este mercado. Más aun considerando que el mercado de commodities sigue firme (3.777 US$/tn LPE) con valores competitivos para la industria nacional.
Sin embargo, Felippa aclaró: “el mercado exportador no está tan atractivo como se lo pretende presentar desde algunos sectores, primero porque los problemas logísticos continúan (falta de contenedores refrigerados y altos costos del flete marítimo) y los precios en los que estamos cerrando operaciones son inferiores a los que referencia el Global Dairy Trade”.
En este sentido, esta semana la Dirección Nacional de Lechería dio a conocer que las exportaciones del sector se desaceleraron un poco pero continúan siendo 15% superiores a las del año pasado, con un acumulado ene-jul de 211.900 tn y un ingreso de divisas de casi 700 millones de dólares.