De cara a la campaña de granos gruesos, donde el maíz ha iniciado el camino hacia una disminución en su siembra, los principales analistas del cereal han empezado a diferenciar las problemáticas y por encima de la Chicharrita, resaltan la pérdida de capacidad para enfrentar mayores costos. Hablan de un pase hacia otro cultivo, dejando a este frente a una posible disminución de 1 millón 300 mil hectáreas.
"Hay que pensar en la microeconomía para favorecer al agro"
Pedro Vigneau, presidente del 3º Congreso Internacional de Maíz, brindó un adelanto de los temas del encuentro. La rentabilidad del agro ajustada. Los requerimiento de capital para la producción tocan los márgenes de pequeños y medianos productores
Este semana, Pedro Vigneau, presidente del 3º Congreso Internacional de Maíz (CIM 2024) que se realizará en Córdoba entre el 28 y 29 de agosto, comentó que se están haciendo todos los esfuerzos para ofrecer -en un momento crítico- el mejor nivel técnico de clase mundial para hablar de las plagas y los principios de solución que impulsaron muchos países (Brasil) desde hace mucho tiempo. Al mismo tiempo, recordó que hay otros factores de importancia para el maíz, como su manejo, genética, nutrición y riego.
Vigneau, que viene de alejarse de su cargo dentro del gobierno nacional por diferencias de criterios, fue contundente al profundizar más a fondo y decir que gran parte de los problemas de la sociedad y el campo siguen vigentes por un descuido de la microeconomía.
“Claramente hay muchos puntos necesarios que se están haciendo y eran un reclamo fuerte. Hay un esfuerzo muy grande hacia la macroeconomía, pero al mismo tiempo se debería pensar en la micro para empujar la generación de empleo y el bienestar de muchos argentinos que lo necesitan”, resaltó objetando el convencimiento del gobierno nacional por relegar la microeconomía.
Desde su interpretación política, este referente puso en dudas la generación de empleo federal si no se mejoran las condiciones de rentabilidad al sector agropecuario. “Somos el único país de América que tenemos diferentes tipos de cambio y derechos de exportación. Se sigue motorizando un combo que hace caer drásticamente la rentabilidad de cualquier productor agropecuario”.
Los números del maíz
Por su parte, agregó que la mayoría se encuentra haciendo las cuentas para proyectar la campaña de granos gruesos y están viendo que los números son muy finos para quienes se sitúan cerca de los puertos y sino no da la ecuación.
“Hay que ir a un nuevo contrato que nos permita crecer. Observar los vectores de desarrollo y dejar de pensar que es solo el campo. Esta el turismo, la minería, energía y la economía de conocimiento que cuentan con la posibilidad de explotar si se les suma las herramientas que necesitan. Seguimos yendo a contramano, ya que no estimulamos la eficiencia y el crecimiento”.
Vigneau reclamó señales poderosas, por encima de las ya anunciadas, para que la sociedad y el productor sientan que se está cambiando. “Todos estamos a disposición y esperando esto. Los planes están al aguardo de condiciones para que todo suceda por medio del apoyo de los decisores políticos”, señaló.
El compás del agro
A su tiempo, recordó que primero, el cepo al dólar se levantaba en 3 meses, después pasó a 6 y ahora se estima que será el próximo año. “No hay garantías de que vaya a suceder. Es la macro y micro al mismo tiempo. Si no se dan cuenta, no van a venir las inversiones, el fondo no te va a dar plata y el mercado tampoco”.
La próxima semana, el Congreso Internacional de Maíz, estará arengado por el conductor Roberto Pettinato, que tendrá la difícil tarea de generar con humor y buen ánimo la motivación de los productores agropecuarios sobre el año para el maíz y esta nueva campaña.
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Por ahora, el presidente de Maizar, Federico Zerboni, dijo que todo se viene dando de forma conjunta y continua. Rápidamente consideró que el tema de la chicharita ha pasado, pero quedaron los márgenes agropecuarios que dan negativos no solo para el maíz, sino también para la soja. “Seguimos con sequía y en una complejidad que nos va a llevar a una campaña día a día. El productor debe estar tranquilo a partir de la información de la red de la chicharrita que permite acceder a todos los informes de situación del país en base a la enfermedad, como ha actuado el frío para atenuar el insecto y –en definitiva- darse cuenta que hay una proyección muy baja y casi nula, de presencia del insecto sobre el cultivo en las siembras tempranas (septiembre). Por ahora, Maizar está relevando como se llega a las siembras tardías (noviembre, diciembre, enero). No vemos fuertes complicaciones. El productor está buscando una imagen de seguridad, bien técnica y estamos trabajando en eso”, resaltó Zerboni.