El ingeniero agrónomo Ricardo Bartosik, jefe de grupo de calidad agroalimentaria del Inta Balcarce e investigador del Conicet, presentó "Alternativas para el manejo de granos con exceso de humedad, en silos bolsa", un tema que cautivó al auditorio ante la húmeda cosecha que se avecina en esta campaña.
Alternativas para el manejo con exceso de humedad
"El grano viene siempre con microorganismos, que van a respirar y consumir la reserva de la semilla y el aire intragranario, van a liberar calor, agua y dióxido de carbono y esto produce el calentamiento del grano, produce olores y pérdida de calidad, por hongos, reducción del peso electroelítico.
La actividad microbiológica es lo que causa el daño en la conservación de grano húmedo", detalló Bartosik al tiempo que apuntó que cuanto más cantidad de aceite tiene un producto más baja debería ser su humedad de conservación, pro eso en girasol es más alto que soja y que cereales.
¿Qué se puede hacer para evitar problemas? El referente de Inta Balcarce dijo que la clave es reducir la respiración, que está afectada por la humedad, temperatura, carga microbiana y concentración de oxigeno y dijo que hay que prestarle especial atención a que "el frío no para a los microrganismos".
Para una mejor conservación, y dejar atrás la humedad, la alternativa es el secado. "Los hongos no van a estar activos y no me van a causar un problema, aunque pueden ser que sí los insectos. Incrementar la temperatura trabajo de la maquina es la principal variable para aumentar capacidad de secado pero tiene como resultado mayor daño en la calidad de la semilla y generalmente menor eficiencia de secado", señaló Bartosik y recordó que el maíz es el grano que más demanda capacidad de secado en Argentina y en la mayoría del mundo y especialmente los maíces tardíos que se cosechan en invierno con clima más húmedo.
Un dato a tener en cuenta es que durante la noche la temperatura del aire y del grano son más bajas y por lo tanto aumentan los requerimientos energéticos. Se incrementan los costos.
También recomendó limitar el secado a no más de 3 puntos por pasada para no gastar tanta energía, si no se produce un desperdicio de energía al aire, y propuso el secado en dos etapas.
Además, el especialista habló de las múltiples ventajas de la seca-aireación, una alternativa para mejorar la capacidad de secado. En lugar de grano frío y seco, listo para ser almacenado en un silo, se logra un grano caliente a 40/50º y húmedo (1,53 por ciento por encima de humedad final). "La seca-aireación aumenta capacidad de trabajo, mejora la eficiencia y la calidad. El problema, requiere ajustar el manejo y silos con aireación reforzada. Es un sistema muy muy bueno y absolutamente probado", precisó.
Respecto a la temperatura, Bartosik apuntó que se trata de una variable en la que es fundamental contar con un adecuado caudal de aire para el mantenimiento de grano húmedo. Si bien bajar la temperatura disminuye la formación de hongos, no los detiene. En silo bolsa planteó que es fundamental el almacenamiento hermético ya que los microorganismos consumen el oxígeno, entonces si la humedad es alta el consumo es muy rápido.
"La bolsa debe mantenerse lo más hermética posible para mejorar el proceso de conservación. Si la mercadería está muy húmeda hay posibilidad de que se desarrollen otros microorganismos, que se desarrollen olores que afectan la calidad comercial. En maíz la temperatura juega un factor importante, de primavera en adelante aumenta el riesgo", señaló y contó que el Inta desarrolló un medidor de hermeticidad de silo bolsa que en menos de 3 minutos brinda un diagnóstico preciso sobre la situación de almacenamiento.