La inoculación pisa fuerte en el campo argentino y desde Rizobacter redoblan su estrategia para apuntalar el crecimiento y ganar nuevos mercados. Está demostrado que las formulaciones garantizan máxima eficiencia en el proceso de fijación biológica del nitrógeno, esencial para el buen desarrollo de las leguminosas. También que la inoculación es una de las pocas prácticas que tienen una alta tasa de retorno de la inversión. "Es una técnica sustentable y muy redituable, te devuelve cuatro veces lo que uno está invirtiendo", manifestó Matías Gorski, Jefe de la línea de Inoculantes Rizobacter.
"El inoculante devuelve con creces la inversión"
Durante Mercosoja 2019, desde Rizobacter expusieron la importancia que tiene en la producción de soja la utilización de inoculantes. Algo que el productor tiene bien en claro porque la adopción de la técnica es muy alta.
"Los números que manejamos en adopción de la técnica de inoculantes son muy altos. Hoy de las 18 ó 20 millones de hectáreas que se cultivan en Argentina, se inocula entre un 80 ó 90 por ciento", reseñó Gorski.
El especialista de Rizobacter explicó que a través de la fijación biológica por las bacterias se brinda al cultivo entre el 60 y 70 por ciento del nitrógeno total que va a necesitar.
"Económicamente son muchos más baratos que fertilizar con algún fertilizante nitrogenado", detalló Gorski. Esto se potencia en el caso de la soja, ya que "por el alto nivel de proteína que tiene que fijar en grano requiere cantidades muy elevadas de nitrógeno".
Desde la compañía líder en inoculantes se esfuerzan para que el productor agropecuario "le preste un poco más de atención a qué tipo de producto está incorporando". Es que hoy en el mercado existe una amplia gama de productos, de distintas calidades, y justamente esa calidad es la que va a terminar repercutiendo en cuan eficiente son esas bacterias que se están aplicando para colonizar el sistema radicular de la soja y la posterior fijación biológica del nitrógeno.
"Cuanto mejor sea el producto más cerca vamos a estar de ese 60 u 70 por ciento de aporte que va hacer la fijación biológica", precisó Gorski.
En Rizobacter existe una amplia paleta de productos que se pueden adaptar a cualquier tipo de condición. Desde los inoculantes más tradicionales, que se pueden aplicar en el mismo momento que se está sembrando, a productos que permiten el tratamiento anticipado, tienen tecnología con protección. También están los productos que mejoran la eficiencia de colonización de esas bacterias sobre los bioinductores, y los inoculantes larga vida, que permiten al semillero tener una herramienta vender su semilla con todos los productos que van aplicados sobre la misma, listos para sembrar. El último producto es de tecnología por ambiente, diseñado específicamente para funcionar en condiciones de alta temperatura y baja disponibilidad hídrica. "No todos los productos son iguales, no sólo desde la concepción de la calidad, sino que existen distintas tecnologías para distintas situaciones", señaló el Jefe de la línea de Inoculantes Rizobacter.
El mundo a sus pies. La empresa tiene a la exportación como un fuerte pilar. Del comercio exterior viene el 30 por ciento de la facturación. "Estamos creciendo muy bien en Sudamérica", enfatizó Gorski. Detalló que en Brasil crece fuerte, sobre todo, el tratamiento profesional con el inoculante larga vida. Uruguay, Paraguay y Bolivia son mercados conquistados. La firma también firmó un nuevo convenio para la distribución de productos en el oeste de Canadá, país en el que ya estaban vendiendo en el este. "En Estados Unidos ya hace más de 15 años que tenemos presencia y recientemente abrimos una subsidiaria en Francia", señaló. Rizobacter ya tiene muy buena llegada sobre todo en Europa del Este, Hungría, Rumania, Ucrania y Rusia, y está trabajando en Turquía también. "La idea es crecer en Francia, Austria, España, Alemania", aseguró Gorski.
Todos los productos que se comercializan en otras latitudes son producidos 100 por ciento en el país. Rizobacter es la empresa que tiene la más alta participación en el mercado mundial de inoculantes para soja. Alrededor del 20 por ciento de la soja que se inocula en el mundo utiliza sus productos. La compañía apuesta a seguir creciendo aún más, más allá de las coyuntura económica nacional.
"Si bien no somos ajenos a la situación puntual que atraviesa el país, tenemos un objetivo que se trazó ya hace más de 5 ó 6 años", indicó.
Y reafirmó que, aunque la economía nacional es impredecible, la empresa viene cumpliendo las metas que se proponen.
"La idea es seguir creciendo en los mercados internacionales a través de la apertura de nuevas subsidiarias y los acuerdos con nuevos socios estratégicos. Hasta ahora nos está yendo muy bien y seguimos con muy buenas perspectivas de crecimiento", señaló el Jefe de la línea de Inoculantes Rizobacter.