Argentina tiene el desafío de posicionarse como productor de legumbres, ya sea en calidad como en cantidad, con el fin de abastecer una demanda mundial en continuo crecimiento. El mejoramiento genético de esta especie es una herramienta importante para lograr la disponibilidad de nuevos materiales de buen comportamiento agronómico y nutricional, necesarios para aumentar la producción a nivel regional.
Primogenita: nueva variedad de arveja
Los cultivos de legumbres, como la arveja, permiten ampliar la oferta de cultivos extensivos invernales como así también ser incluidos en secuencias agrícolas, con el beneficio extra de fijar nitrógeno del aire biológicamente favoreciendo así una agricultura más sustentable. Por otra parte, tienen un consumo de agua menor que los cereales de invierno. A su vez, esta legumbre puede ser incorporada en la cadena alimenticia del hombre debido a las propiedades funcionales de sus componentes y a su versatilidad para ser cocinada.
Los granos de arveja pueden ser procesados de diversas maneras: congelado, decorticado, molienda y fraccionamiento (para obtener fibra alimentaria, almidón y distintas fracciones proteicas). Dependiendo del uso final al que se destinen, pueden llevarse a cabo otras etapas adicionales como: tostado, horneado o extrusión. De esta manera, pueden comercializarse arvejas secas, congeladas, arvejas enlatadas, harina de arveja, sopas, almidón, concentrados y aislados proteicos. El uso de las arvejas como alimento, o como ingrediente en la industria alimenticia, resulta en una gran variedad de productos.
investigación. El único programa de mejoramiento de arveja en instituciones públicas, se desarrolla en la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), en convenio con el Inta Oliveros. En este convenio de cooperación técnica, se articulan esfuerzos interinstitucionales que promueven el desarrollo local de genotipos adaptados a la región.
María Andrea Espósito, doctora del Inta Oliveros, comentó que "este programa, utilizando metodologías convencionales, ha logrado hasta el momento la obtención, entre otros materiales, de una nueva variedad pre-comercial de arveja verde áfila". Esta variedad es la primera lograda en el marco del convenio Inta-FCA UNR, denominada Primogénita FCA-INTA. Está en trámites de inscripción en el Instituto Nacional de Semillas (Inase), mientras continúan las evaluaciones agronómicas a nivel local y zonal, explicó.
Según palabras de la especialista, esta nueva variedad presenta un rendimiento superior respecto a la variedad más sembrada, debido a su buen porte a cosecha y a su comportamiento a la enfermedad de oídio. "En la campaña anterior en el Inta Oliveros, en el ensayo comparativo de rendimiento dentro del marco de la Red Nacional de Cultivares de arveja, la Primogénita presentó los mayores rendimientos dentro de las variedades de arveja verde; misma situación presentó en la localidad de Bogado", destacó Espósito.
Otro factor relevante en la utilización de materiales mejorados es el económico ya que, según explicó, "permitiría aumentar el volumen de exportaciones, generando un mayor ingreso de divisas para esta región". Además, "la creación de variedades producidas localmente habilitaría a disminuir los costos de importación de semillas, con la ventaja adicional de trabajar con materiales adaptados a las condiciones agroecológicas locales, maximizando los rendimientos" remarcó la especialista en legumbres.
El desarrollo de variedades propias de buen comportamiento agronómico que aporten una mejora sustancial a las ya existentes en el mercado, es un objetivo prioritario del programa de mejoramiento del convenio, destacaron desde la estación experimental.