el granizo sobre el fin del ciclo le jugó una mala pasada al trigo. Por el efecto climático en octubre subieron a 104 mil las hectáreas trigueras afectadas y se recortaron en 200 mil toneladas las estimaciones para el cereal fino de este ciclo en la zona núcleo.
Trigo: el granizo de octubre generó un recorte de 200 mil toneladas
Así lo reportan los últimos informes de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Rosario, los cuales señalan que "el mes de octubre fue cruel con el cultivo de trigo" y detalló que hubo heladas y casi 50 mil hectáreas arrasadas por granizo, aunque las lluvias que llegaron al final del ciclo, aunque en poca cantidad, sirvieron para achicar el recorte inicial de rindes.
Mientras el trigo comienza a recolectarse en el norte provincial y aún queda un trecho por andar en la región, el gobierno nacional difundió las proyecciones de la campaña agrícola total del ciclo 2018/19, que ubicó en 140 millones de toneladas. "Sería la mayor de la historia de la Argentina, y representa un 25% más en comparación a la campaña del año último con una cosecha récord de trigo", dijeron desde la Secretaría de Gobierno Agroindustria de la Nación.
Zona núcleo. "Se espera un leve calentamiento del Pacífico Ecuatorial hacia fin de año", detalló el climatólogo de GEA, José Luis Aiello, quien también dijo que "continuarán los fenómenos anómalos durante toda la campaña".
Según los datos más precisos de GEA, el trigo desciende otro escalón en la región núcleo, de las 4,9 millones de toneladas ahora se esperan 4,7 millones de toneladas.
El relevamiento aclaró que "esta vez el problema no es el rinde, que mantiene sus expectativas en 35,2 quintales por hectárea (qq/ha), sino que el problema son los daños del granizo de octubre".
En agosto hubo un evento muy fuerte sobre el oeste cordobés que había afectado a 30 mil hectáreas. Se estimaban entonces 55 mil hectáreas perdidas en la región. Pero tras los eventos de granizo de octubre, con su mayor foco de destrucción puesto en el noroeste bonaerense, la pérdida de hectareaje se incrementó en 49 mil hectáreas. "Esta pérdida valorizada con un rinde de 35 quintales equivale a un descuento de 366 mil toneladas", detalló GEA.
De todos modos, aclaró que lo bueno es que el agua llegó a la región. "Si bien es tarde para producir cambios significativos en el rinde, las lluvias de la última quincena mejoraron la condición de los trigos y ayudan a mantener las expectativas", indico GEA.
El trigo se encuentra en pleno llenado de granos. Las lluvias mejorarían el peso de granos pero el cereal ya está jugado, el rinde está hecho. La cosecha de los primeros lotes comenzará en veinte días y están más atrasados, los lotes ubicados al norte de Buenos Aires se encuentran en espigazón y floreciendo.
Por otra parte, las lluvias de las últimas semanas lograron que se produjera una recomposición de reservas para la campaña gruesa. "La siembra de soja avanzó un 20%", ya que estaba demorada en un principio por la falta de agua y luego por las sucesivas tormentas, el avance de las sembradoras es similar al de un año atrás.
Pero las lluvias de la última quincena de octubre también están permitiendo recuperar las reservas hídricas del suelo. Para lograr reservas óptimas los requerimientos ahora están entre los 60 a 80 milímetros en Santa Fe y entre 100 y 120 milímetros en Córdoba. "El potencial productivo de la soja y el maíz depende de ello", detalló GEA.
Además, indicó que el maíz crece lento pero con mejor condición y sin presencia de plagas.
"El maíz de primera transita etapas vegetativas en buenas condiciones. Las heladas y las tormentas de granizo atrasaron el crecimiento, pero la mayoría de los cuadros lucen recuperados ahora. Están desplegando su segunda a sexta hoja", detalló GEA.
Mercado en alerta. El especialista de Agro Perspectiva de Universidad Austral, Dante Romano, señaló que los precios del trigo disponible empalmaron a la baja con los de campaña nueva aunque recordó que los productores reaccionaron a la oportunidad de altos precios que tuvieron en agosto con ventas muy agresivas.
"Si los puertos se enfocaran en recibir los negocios ya concretados, se quedarían sin logística de recepción para el resto de la mercadería", dijo y acotó que como hay 35% del trigo vendido, y entre noviembre y marzo normalmente se vende el 50% de la cosecha, se descarta que "el cupo va a valer" por lo que quien quiera entregar con descarga para cobrar deberá asumir un precio bastante más bajo que el actual.
Sin embargo las posiciones más largas están con precios que siguen siendo más que interesantes rondando los 200 dólares la tonelada (marzo y julio).
Por eso aseguró que "está claro es que al trigo hay que esperarlo y no vender en cosecha", aunque "la duda es si vender ya a marzo o julio, o esperar una mejora mayor, teniendo presente que los picos de julio estuvieron en la zona de los u$s 250 la tonelada.
Atendiendo a las variables internacionales afectados por la guerra comercial, Romano dijo que lo ideal es "capturar precio diferido por una buena parte de la producción, o cubrirlo con opciones que ya están disponibles".
Centro norte. En el centro norte santafesino, las lluvias que se manifestaron con variadas intensidades, chaparrones algo intensos y luego, en general, con bajos montos, permitieron una muy buena infiltración y recarga de los perfiles.
Así lo reportó el Sistema de Estimaciones Agrícolas (SEA) de la Bolsa de Santa Fe, el cual indicó que al cierre del informe semanal que se realizó este miércoles, se llevaban sembradas 89.000 hectáreas (ha)con maíz de primera, el 47,3% de la intención de siembra que es 188.000 ha; 28.800 ha de arroz, es decir el 90% de la intención de 32.000 ha y 46.250 ha con soja de primera, 5%, sobre una intención de 925.000 hectáreas.
En esa región, las precipitaciones de la semana fueron regulando y marcando el ritmo de avance en el proceso de cosecha de trigo.
Esa tarea se observó en los primeros lotes de los departamentos del centro del área de estudio, mientras que en los departamentos del norte se logró un 40% de recolección, consolidando los rendimientos promedios enunciados y registrando aumentos en rindes a medida que la misma fue progresando.
Se recuerda que en los departamentos del norte del área de estudio, los rindes alcanzaron promedios mínimos de 18 a 20 qq/ha y promedios máximos de 32 a 34 qq/ha. Y los primeros rindes en los departamentos del centro fluctuaron entre 28 a 35 qq/ha.