La historia del cordón agroindustrial de la región está por iniciar una nueva fase. Con el inicio de noviembre, Santa Fe Bio tomó posesión de una porción del terreno de la refinería de YPF en San Lorenzo, donde comenzará a construir una planta para producir biocombustible para aviación (SAF).
Biocombustible: avanza un plan para transformar el cordón agroindustrial
Larga la primera fase del plan de YPF y Essential Energy para producir combustible sustentable de aviación. Fuerte interés para el desarrollo de proveedores
Por Álvaro Torriglia
Refinería San Lorenzo. Inicia un plan para reconvertirla en biorrefinería.
El emprendimiento conjunto de Essential Energy e YPF, a través de la sociedad Santa Fe Bio, demandará un desembolso de u$s 400 millones en los próximos 37 meses, hasta que esté lista para producir 220 mil toneladas anuales de SAF, HVO (gasoil bio) y coproductos.
Federico Pucciariello, fundador de Essential Energy, destacó que la asociación de este grupo pionero en la producción de biocombustibles con la petrolera estatal abre una nueva línea de trabajo para poner en valor internacional “la Arabia Saudita verde” que entiende es esta región. También destacó la refundación que significará para el cordón industrial, que justamente tuvo en la refinería fundada a fines de los años 30 una de sus piedras fundacionales.
Más de un centenar de empresarios participaron de una nueva edición de AIM Conecta, el programa de desarrollo de proveedores de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (AIM) de Rosario. La tercera edición fue para interiorizarse sobre el proyecto de inversión más importante de los últimos años en la provincia: la reconversión de la histórica refinería de San Lorenzo en una biorrefinería para producir biocombustible de avión (SAF). El empresario subrayó la intención de consolidar una cadena de proveedores locales.
La línea de producción, que transformará materias primas como residuos de la industria aceitera o grasas en combustible para avión o HVO, con destino a exportación, se montará sobre un lote de la refinería que hoy opera YPF en actividades fundamentalmente logísticas.
Las fechas claves
Santa Fe Bio tomó posesión del terreno y en dos semanas se abrirá una oficina técnica. En diciembre podría estar funcionando el puerto y el área logística.
Mientras se monta la planta, la nueva refinería trabajará en la recepción, consolidación y embarque de materia prima para otras biorrefinerías del mundo. “Seremos la única empresa santafesina operando un puerto sobre el río Paraná”, subrayó. Esta operación demandará la “desvinculación” de los caños de transporte de combustible fósil que hoy utiliza YPF para embarcar combustible fósil.
El plan prevé completar en dos o tres meses las obras de ingeniería básica y, sobre el final del primer trimestre de 2026, comenzar a recibir los embarques con equipos que se construyen en Italia. La biorrefinería producirá con tecnología Honeywell, licenciada a partir del contacto establecido durante una gira comercial de la que el empresario participó en 2017 junto al entonces gobernador Miguel Lifschitz.
En paralelo a este proceso se desarrollará también la fase financiera, para lo cual es clave la llegada de YPF con bancos internacionales.
Cambio de clima
La sociedad con la petrolera estatal cambió una historia de disputa entre hidrocarburos y biocombustibles. De hecho, este último sector, que se desarrolló a la luz de la ley de promoción impulsada por Néstor Kirchner, sufrió durante las últimas administraciones una serie de decisiones políticas que limitaron su expansión.
El combustible de aviación sostenible (SAF) producido a partir de biomasa tiene una química similar a la del combustible de aviación tradicional, derivado de combustibles fósiles, pero reduce al mínimo las emisiones de carbono. Su mercado no está atado al corte obligatorio sino a las metas globales de descarbonización de la aeronáutica. En 2027 entrarán en vigor las primeras regulaciones en Europa.
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Pucciariello destacó la visión “disruptiva” del actual presidente de YPF, Horacio Marín, con quien cuenta que arrancó discutiendo por el cambio climático y terminó asociándose en un emprendimiento que considera un antes y un después. “La cuestión no es petróleo o biocombustible, es petróleo y biocombustible”, señaló y consideró : “Si esto se demuestra como un caso de éxito, significará la reactivación del cordón industrial pero también el desarrollo de toda una línea nueva de proveedores metalmecánicos”. La iniciativa también será propuesta para entrar en el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (Rigi).
El nuevo cordón
La reconversión de refinería San Lorenzo en biorrefinería es emblemática. Fundada en 1938 fue un hito clave para el desarrollo del cordón industrial, que creció con la tracción dominante de la petroquímica hasta que comenzó a ascender la industria aceitera.
Ahora, de la mano de los biocombustibles de primera y segunda generación asoma una nueva etapa.
La petrolera estatal fue propietaria de la refinería hasta 1993, cuando fue vendida a Pérez Companc en el marco de la privatización. Luego fue propiedad de la española Repsol y más tarde de la brasileña Petrobras. En 2002 pasó a manos de Oil Combustibles y, a fines de 2018, fue adquirida nuevamente por YPF en sociedad con Dapsa por 85 millones de dólares. La empresa petrolera estatal tiene la titularidad exclusiva de las instalaciones y el puerto.
“Es un proyecto histórico para la región”, dijo el titular de Essential Energy, que también viene trabajando con los gremios. Por caso, una de las consecuencias del emprendimiento es que se reactivará el club YPF de San Lorenzo.








