La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) aumentó la estimación de producción de trigo en 500.000 toneladas respecto de la previsión de la semana anterior a un nuevo volumen récord de 20,3 millones de toneladas. El cambio se produjo gracias a mejores rindes a los esperados en el centro del área agrícola.
Pronostican un récord de producción de trigo de 20,3 millones de toneladas
De concretarse este guarismo, la cosecha de la actual campaña obtendrá 3,3 millones de toneladas más que el anterior ciclo.
La recolección del cereal se ubicó en el 32,8% de las 6,6 millones de hectáreas implantadas, tras un fuerte avance de 15,2 puntos porcentuales
A pesar de haberse cerrado las labores en el Norte, que se posicionó como la tercer peor cosecha de la última década, a medida que las maquinas avanzaron sobre el centro del área agrícola, el rinde promedió creció de 16,2 quintales por hectárea (qq/ha) la semana pasada a 24,4 qq/ha en los últimos días.
“Frente a esta mejora de los rindes obtenidos y esperados sobre las regiones del centro y sur del área agrícola, se aumenta la proyección en 500.000 toneladas”, destacó la BCBA.
Por otro lado, la siembra nacional de soja ya cubrió el 39,3% de las 16,5 millones de hectáreas tras registrar un avance intersemanal de 10,7 puntos. A la fecha el 71,4% de las 6,4 millones de hectáreas implantadas se concentraron sobre ambos núcleos, el sur de Córdoba y el norte de La Pampa - oeste de Buenos Aires.
En cuanto a maíz, las lluvias mejoraron las reservas hídricas en los cuadros tempranos de maíz con destino grano comercial. Las labores de siembra se concentraron en el sur del área agrícola nacional y a la fecha ya se logró sembrar el 30% de las 7,1 millones de hectáreas proyectadas para la campaña en curso, en números absolutos más de 2,1 millones de hectáreas.
La experta Marianela de Emilio, del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta), advirtió ayer que el trigo y el maíz, son “los más afectados por la suba de costos y disponibilidad de fertilizantes” y que esto pude llegar a repercutir en un menor nivel de productividad.
De Emilio, de la Agencia de Extensión Rural Las Rosas en la provincia de Santa Fe, evaluó que el trigo y el maíz “son los más propensos a pagar la suba de precios de fertilizantes con menor superficie de siembra y/o menor nivel de fertilización”.
La especialista señaló que “en los últimos seis meses el precio internacional de los fertilizantes más usados para la producción de granos, principalmente a base de nitrógeno, registró subas, mientras el precio de los granos tuvo bajas”.
El encarecimiento de ese insumo obedeció a “problemas de abastecimiento pasada la crisis sanitaria, y posterior crisis energética, que causó suba de costos de producción”, explicó De Emilio en un informe sectorial.
Según sus cálculos, de mayo a noviembre 2021, la urea, uno de los fertilizantes nitrogenados más usados, elevó su precio 268%, a diferencia del precio de maíz en el mismo período, que bajó 22%.
A nivel local y en dólares, de mayo a noviembre 2021, la urea aumentó 190%, el maíz bajó 8% y la soja cayó 3%, mientras el trigo registró un alza de 4%, “insignificante frente a la suba de los fertilizantes”, consideró la experta.
Este fuerte repunte de los fertilizantes eleva su incidencia sobre los costos totales de implantación (siembra y protección del cultivo).
“Suponiendo costos productivos de la zona núcleo, al Sur de Santa Fe, se calcula que los fertilizantes representan 75% del costo total de implantación de trigo, cuando hace seis meses representaba 50%”, puntualizó.
En maíz, en tanto, el costo de fertilizantes representa más de 40%, frente a 30% en mayo; y en la soja es hoy de 14% del costo total de implantación, a diferencia del 10% que representaba seis meses atrás.
De Emilio señaló que “si bien estas proporciones son un ejemplo basado en un presupuesto de una zona de la Argentina, el impacto de estas fuertes subas, afecta a todos los países productores de granos”.
“Posiblemente, de no revertirse esta situación, afecte a las decisiones de siembra y de tecnología a aplicar, especialmente la cantidad de fertilizante, considerando que los precios de los granos no permitirán en muchas zonas, invertir en tecnología de insumos al nivel que lo hicieron en las últimas campañas”, concluyó.