El ómnibus que contiene varios proyectos de ley, entre otros, blanqueo, pago de deudas históricas a jubilados con sentencia de la Justicia favorable, o del 15 por ciento a las provincias, y reforma del sistema previsional, se aceleró en Diputados. Obtuvo dictamen de mayoría y quedó servido para que el miércoles próximo vaya al recinto y obtenga media sanción. Como ya es costumbre en esta etapa política, Cambiemos arranca proponiendo un proyecto invotable para la oposición y luego, rápidamente, accede a desandar muchos tramos, negocia, baja artículos e incorpora otros. Y, de ese modo, consigue encauzar una alianza de mayoría.
Con muchos cambios, el blanqueo y la reforma obtuvieron dictamen
Por Rodolfo Montes
El dictamen firmado ayer ya no propone el oprobio de castigar con fabulosas multas y prisión a terceros —incluida la prensa— que, eventualmente, revelen la identidad de los blanqueadores de capitales que se acojan a los beneficios de propone la nueva ley.
Tampoco se hablará de emergencia previsional, porque el sistema no sufre ninguna emergencia. En cuanto al Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS), a pedido del Frente Renovador (FR) y del bloque Justicialista (BJ), Cambiemos accedió a que la ley no habilite la venta de acciones de las empresas donde participa el Estado —unas 46— por debajo de un piso del 7 por ciento del FGS (hoy está en 12 por ciento) por ciento. Y solamente para los casos específicos de oferta pública de acciones, canjes y fusiones, entre otras.
Otro paso que desanda —aunque parcialmente— el oficialismo es sobre el impuesto a los bienes personales, que el proyecto de ley original proponía directamente eliminarlo, en una escala decreciente hasta 2018. De todos modos, cambiarían los topes mínimos de la escala para comenzar a pagar, que pasaría a 800 mil pesos.
Con todo, el dictamen de mayoría, que será tratado en el recinto, contará con firmas oficialistas más las del FR y el BJ. La bancada opositora ampliamente mayoritaria, el FpV, irá con uno propio y una impugnación política y conceptual más severa que el mero cambio de artículos, en algunos de los cuales, de todos modos, se manifiesta de acuerdo.
También elaboraron un dictamen propio Alicia Ciciliani y Margarita Stolbizer. Las diputadas del interbloque Progresistas pusieron especial reparo en el rechazo al blanqueo de capitales que propone la ley ómnibus. Sin embargo, como vienen marcando en otros temas, acompañarán la estrategia que decidan el FR y el BJ.
La izquierda de inspiración trotskista en el bloque FIT también elaboró un dictamen propio y rechazó la propuesta oficialista. El diputado Carlos Heller —aliado del FpV— impulsará su propio proyecto. El dictamen que irá el recinto, de todos modos, no es un paquete cerrado. Muchos detalles quedaron abiertos para los largos seis días que restan.
"Impulsamos un blanqueo y todos los opositores que hoy son oficialistas, y lo votarán a favor, en aquel momento lo impugnaron y nos acusaron de cualquier cosa", planteó durante el plenario de comisiones un siempre intenso Axel Kicillof.
"La gran diferencia es que ahora sabemos quiénes son muchos de los evasores y que están siendo investigados por la Justicia. Me refiero a las 4.040 cuentas en el HSBC y a las del Panamá Papers", agregó el ex ministro de Economía.
Para el ahora diputado el intento de seducir con un blanqueo a capitales que no se sabía quiénes eran ni dónde estaban tenía la razonabilidad de un Estado necesitado y sin otro elemento de persuasión. "Pero ahora tenemos los nombres, ¿y los vamos a perdonar? Es, justamente, lo que no tenemos que hacer en este momento", abundó.
Kicillof también rechazó con vehemencia el capítulo de la nueva ley que promueve crear una pensión equivalente al 80 por ciento de la jubilación mínima para las personas que no pueden acreditar los aportes suficientes para conseguir jubilarse. Planteó seguir con el sistema de moratorias que rige en la actualidad.