La campaña electoral española sufrió ayer un giro inesperado en su tramo final, al estallar un escándalo que implica al ministro del Interior de Mariano Rajoy en una supuesta conspiración para desprestigiar e incriminar a dirigentes independentistas catalanes en casos de corrupción. A sólo cuatro días de los comicios del domingo, los candidatos opositores exigieron de forma unánime la dimisión del ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, quien ya anticipó que no piensa dar ese paso y, por el contrario, respondió con un contraataque al considerarse la víctima de esta filtración.
Escuchas comprometen la campaña de Rajoy
Rajoy, que encabeza los sondeos de cara al 26J (26 de junio), atribuyó el escándalo a maniobras electorales y ratificó su confianza a Fernández Díaz. "Es lo de siempre: como estamos a cuatro días del final de la campaña, hay algunos que intentan aprovechar y pescar en río revuelto para ver qué sacan", dijo el líder del Partido Popular (PP) en un acto en Mallorca, donde fue increpado por una mujer al grito de "¡partido de corruptos!". Previamente explicó que no tuvo conocimiento del caso hasta el martes, algo que también aseguró Fernández Díaz, a pesar de que nuevas grabaciones revelan que estaría mintiendo.
El diario digital Público difundió grabaciones de dos conversaciones que Fernández Díaz tuvo con el jefe de la Oficina Antifraude de Cataluña, Daniel de Alfonso, en el marco de un supuesto plan para fabricar pruebas contra dirigentes independentistas poco antes de la celebración de la consulta soberanista del 9 de noviembre de 2014. En los fragmentos se escucha a estas dos personas discutir sobre cómo conseguir datos para desprestigiar a políticos de la independentista Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y Convergència Democrática de Catalunya (CDC), el partido del ex presidente catalán Artur Mas, principal impulsor de la secesión.
Además, en un nuevo audio publicado ayer el ministro de Interior informa a De Alfonso que Rajoy estaba al tanto de sus actuaciones. "El presidente del gobierno lo sabe", asegura Fernández Díaz. "Yo se lo dije a él, es un hombre discreto donde los haya. Por su puesto, su mano derecha no sabe lo que hace su mano izquierda", añade el funcionario. Sin embargo, Fernández Díaz negó de forma rotunda que Rajoy supiese algo hasta el martes cuando se comunicó telefónicamente con él para solicitarle información a raíz de la noticia que adelantaba Público. "Le expliqué que me acababa de enterar y que eran grabaciones de hace dos años y que (en la reunión con De Alfonso) hablamos de las cuestiones que son competencia de esa oficina y del Ministerio del Interior respecto de la lucha contra el fraude", dijo hoy Fernández Díaz en declaraciones a la prensa en Barcelona.