La Federación Agraria Argentina (FAA) manifestó su preocupación frente a las condiciones en las que el gobierno nacional plantea la reestructuración interna del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta). Según la posición histórica de la entidad, el organismo debe funcionar como "la herramienta que le garantice a los pequeños y medianos productores agropecuarios del país, el desarrollo y el acceso a la tecnología aplicada en su actividad".
FAA reclama por los cambios en el Inta
La entidad federada salió a sentar posición a raíz de los cambios planteados en el organismo y planteó la necesidad de que conserve su autarquía operativa y financiera.
"Entendemos que todos los estamentos que componen al Inta deben funcionar en cada territorio productivo, colaborando con el productor en la optimización de los recursos, apuntando al desarrollo y crecimiento que cada actividad requiere", dijo en un comunicado la FAA.
En ese sentido, señaló que el Inta "debe garantizar la soberanía tecnológica puesta al servicio de la producción nacional", razón con la cual el organismo "debe contar con las partidas presupuestarias que correspondan para poder continuar las actividades de extensión e investigación, y asegurar el progreso de los productores, en especial de los más vulnerables".
"No hay que permitir que el Inta se convierta en una herramienta de utilización política en favor de los intereses mezquinos de la política partidaria, tanto desde afuera o desde el mismo seno del organismo", dijo enfáticamente la entidad.
El Inta tiene garantizado su funcionamiento mediante la ley 25.641 que en su artículo 2º inciso a, que establece la asignación del equivalente a medio punto porcentual (0,45) del valor total CIF de las importaciones (fondos que son detraídos de los gravámenes, derechos y tasas percibidos por la administración nacional de aduanas) para el organismo. Ese dinero debe ser depositado diariamente a la orden del Inta y lo que no se ejecute debe quedar dentro del organismo.
"Estamos convencidos que los trabajadores que desempeñan funciones dentro del Inta deben ser altamente calificados", argumentó FAA y agregó que bregan desde la entidad por un "Inta autónomo, económicamente sustentable y políticamente independiente".
Y por esa razón instan a "los responsables a destinar los fondos necesarios y requerir al plantel de trabajo la mayor dedicación posible para que los productores tengan acceso a la mayor cantidad de tecnología para el progreso particular y colectivo que el país demanda en los tiempos que corren", detalló la entidad.
Ley de semillas. Por otra parte, la entidad federada también sentó su histórica posición respecto de la reforma de la ley de semillas, una iniciativa que podría tratarse en poco tiempo en la Cámara de Diputados de la Nación. En ese marco, la entidad les pidió a los legisladores realicen algunas reformas al texto del dictamen que fue firmado en noviembre de 2018 con la idea de tener definiciones más claras y contundentes que den las garantías a los pequeños y medianos productores.
En ese sentido citaron algunos como:
►Ampliar la cantidad de productores con derecho al uso propio gratuito, para que la mayor cantidad posible
siga amparado por el derecho milenario al uso propio gratuito de sus semillas. Puntualmente le reclaman a los diputados el máximo esfuerzo para que en la ley quede plasmado un umbral de agricultores exceptuados mucho mayor al de 3,8 millones de pesos de facturación anual que se habían propuesto.
►Orden público: la FAA reclama que el uso propio gratuito sea declarado de orden público, es decir, sean irrenunciables para las partes y que no puedan ser modificados por contratos abusivos o extorsivos.
►Actualización por inflación del umbral: el monto de facturación máximo que marque el universo de productores que mantienen el derecho al uso propio gratuito debe ser definido, además, de manera tal que asegure su actualización periódica y adecuada, de forma de evitar que la inflación.
►Prohibición por ley y explícita de los sistemas privados compulsivos de cobro en puerto o por productividad: la FAA reclama que debe reforzarse expresamente que el pago de los derechos de propiedad intelectual se agota al momento de la compra de la semilla, ya que los vacíos de la ley vigente han generado las peores situaciones de abuso de la cadena, al punto que por controles privados no acordados por los productores (hechos de manera forzosa y sin control del Estado) grandes compañías multinacionales han aplicado junto con otros actores poderosos de la cadena muestras compulsivas para cobrar a los productores un canon de producción en puerto.
Según la entidad federada "con todas estas condiciones aseguradas, una modernización de la ley que cuente con el apoyo de diferentes actores políticos puede ser positiva, porque, de lo contrario, veremos más vulnerados nuestros derechos ancestrales, en manos de actores concentrados", aseguraron.