Comienza un periodo clave para la campaña gruesa 2022/23, donde las decisiones estarán condicionadas por diversos factores, siendo el clima, y en esta caso principalmente la falta de lluvias, una cuestión que mantiene en vilo al productor agropecuario.
Clima: sin indicios de lluvias de cara a la campaña gruesa 22/23
Con condiciones meteorológicas muy calmas en el centro del país, esta será una quincena en la cual el déficit de precipitaciones seguirá siendo pronunciado, agravando el contexto actual de sequía en la zona núcleo y toda la franja central de Argentina.
El jueves posiblemente será el día con más nubosidad, marcado por un cambio de viento al sur, que comenzará el miércoles sobre el oeste del país y continuará por el este y el norte durante el día. Esto producto de la gestación de una ciclogénesis sobre el este de Argentina, y una posterior formación de un centro de bajas presiones que dejará entre jueves y viernes algunas precipitaciones muy escasas y sectorizadas sobre las provincias centrales y el Litoral.
La amplitud térmica diaria también sea un factor importante para la semana, donde las mañanas continuarán siendo frías en líneas generales, pero sin llegar a tener valores rigurosos como meses atrás, y las máximas empiezan a elevarse de manera marcada. La estabilidad con cielos despejados, y el viento predominante norte, son características de la mayor parte de las provincias centrales.
La Ñina, una constante
El actual fenómeno climatológico de “la Niña” tuvo comienzo en septiembre de 2020, y de extenderse hasta fin de año, serian tres inviernos boreales consecutivos, dando lugar a un “triple episodio”.
El Niño es la fase cálida, y suele aparecer primero: ocurre cuando las condiciones de presión del aire cambian, debilitando los vientos alisios en el hemisferio sur del Pacífico. Así se conoce a los vientos que soplan habitualmente de este a oeste en ese océano, desde regiones subtropicales de alta presión hasta zonas ecuatoriales de baja presión.
La Niña, en cambio, ocurre cuando se da el fenómeno contrario: los alisios son muy fuertes, se refuerza la subida del agua fría profunda en la zona ecuatorial y la temperatura del mar cae por debajo de lo normal. Estos dos fenómenos no siempre se alternan. A veces, como está ocurriendo ahora, se repite solo una de las fases varias veces, sin que aparezca la contraria.
En nuestra zona la Niña genera primaveras de gran amplitud térmica, mañanas frías, tardeas calidas y noches frescaas, con escasas lluvias y escasa humedad.