La Niña”, el fenómeno atmosférico que puso en jaque a la campaña de soja en Argentina está oficialmente en retirada. Así lo afirmó el especialista en ciencias meteorológicas Jose Luis Aiello al señalar que “en junio se alcanzaría la neutralidad, ya que el océano Pacífico va hacia esas condiciones hasta el comienzo de la primavera”. Este viraje es por demás oportuno ya que se transforma en un empalme perfecto para el inicio de la campaña fina que está a punto de arrancar y, al mismo tiempo, un envión final para la gruesa, que a último momento logró aprovechar mejores condiciones de humedad y arrancó con la recolección.
La "Niña" está en retirada y le da un envión a la campaña fina
“En abril si bien tendremos coberturas nubosas, las mismas no generarían lluvias conflictivas para la recolección”, dijo Aiello en el último reporte de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) aunque indicó que “no hay que descartar que pasado este mes, las condiciones de humedad pudieran dificultar las tareas de recolección”.
Pero además, indicó que si se concretan estas condiciones de “neutralidad” hasta la primavera, “los forzantes extra Pacífico van a definir las características climáticas de buenas condiciones del arranque de la cosecha de la campaña fina en Argentina”.
Con este escenario y las buenas condiciones de precios, el trigo arranca con el pie de derecho el nuevo ciclo dejando atrás un período donde la falta de agua lo condicionó. “En las próximas horas, el pasaje del primer frente de abril producirá lluvias en la región pampeana y esperamos que la gran disponibilidad de humedad de las capas bajas de la atmósfera se capitalice en precipitaciones de moderada intensidad y amplia distribución”, agregó Aiello.
Cosecha gruesa en Santa Fe
Por lo pronto, las cosechadoras están a full en el centro norte de Santa Fe donde el proceso de recolección comenzó esta semana con rendimientos que oscilaron entre 20 y 35 quintales por hectárea (qq/ha), en tanto se estima que un 85% de los lotes se encuentran en estado de bueno a muy bueno.
Así lo indico el informe semanal del Sistema de Estimaciones Agrícolas (SEA) que confeccionan el Ministerio de la Producción de la provincia y la Bolsa de Comercio de Santa Fe.
Los mejores valores se registraron en la zona sur del área de estudio, con hasta 35 qq/ha, en tanto los sojales del norte exhibieron rindes de entre 18 y 20 qq.
Brechas en la zona núcleo
En cambio, las cosecha de soja en la región núcleo muestra los estragos de la Niña. La brecha productiva se profundiza y en plena recolección hay diferencias de 40 quintales entre el oeste y el este de la región núcleo según indicó GEA. “Buena parte del este de Córdoba supera los 45 a 50 qq/ha en soja de primera mientras que en el NE bonaerense se trilla con 8 a 20 qq”, puntualizó. Así, “el 37% de avance de cosecha muestra 5 a 10 qq menos en las zonas más afectadas y 5 quintales extras dónde las lluvias fueron mejores”.
Los lotes del este cordobés favorecidos por la recuperación pluvial de enero, se ubican primero en la tabla con zonas que promedian 45 a 50 qq/ha. En el extremo NE de Buenos Aires están los peores valores: promedios de 10 qq/ha y rindes de 8 a 20 qq/ha como en La Violeta o Baradero. Hacia Pergamino la cosa mejora, con de 25 a 36 qq/ha en la primera tanda, un 10% de la cosecha.
En el sur de Santa Fe, los escasos 20 a 50 milímetros extra que dejó febrero siguiendo el gradiente oeste a este fueron claves para salvar los rindes del desastre. En Carlos Pellegrini los rindes estimados coinciden con los obtenidos, 42 qq/ha. En Cañada de Gómez el rinde medio se ubica en 32 qq/ha. En el Trébol esperaban más que los 33 qq/ha que marca el 40% de la cosecha. Hacia el norte de Buenos Aires están los cuadros más afectados y donde más se nota la heterogeneidad. Hay valores 20 a 50 qq/ha en General Pinto, pero los promedios son bajos, en torno a los 30 qq/ha. La franja agrícola cercana al río muestra las peores cifras: 8 a 15 qq/ha.
Recorte para la soja
Esta semana la Bolsa de Cereales de Buenos Aires volvió a recortar la estimación de producción de soja en un millón de toneladas, de 44 millones a 43 millones, a causa de los bajos rindes en zonas productoras afectadas por las sequías.
De esta manera, de concretarse el actual guarismo, el ciclo 2020/2021 del cultivo se ubicará 6 millones de toneladas por debajo de la campaña 2019/2020.
Tras un avance semanal de la cosecha de 2,6 puntos porcentuales (pp) se alcanzó a cubrir el 3,5% de las 17,2 millones de hectáreas aptas, con los trabajos concentrados sobre el centro del área agrícola, en especial, sobre los núcleos norte y sur y el centro-norte de Santa Fe, regiones de una gran importancia relativa para la campaña, dijo la Bolsa de Buenos Aires.
Estos números, que en buena medida se daban por descontados, siguen manteniendo firmes las cotizaciones de la soja, pero impulsando también al resto de los commodities agrícolas. Frente a eso, las liquidaciones del sector agroexportador lograron en marzo un récord absoluto en los últimos 18 años, al alcanzar los u$s 2.773,5 millones por la suba en los precios y la liquidación de stocks, según informó la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC).
Por otra parte, las exportaciones agroindustriales siguen consolidándose. Sumaron ingresos por u$s 38.055 millones en 2020, y aunque eso significó una caída de 8% respecto de 2019, el sector consolidó una participación del 69% en el total exportado por el país,según un informe de la Fundación Agropecuaria por el Desarrollo de Argentina (Fada).
Por el lado del maíz, continuó la recolección durante la semana que finaliza y alcanzó a cubrir el 12% de las 6,26 millones de hectáreas aptas. “Los rendimientos registrados se ubican por debajo de las productividades de la campaña 2019/20”, indicó la Bolsa de Buenos Aires.