El incremento de las retenciones al 33% para los subproductos de soja que pretende llevar adelante el gobierno _que reducirá el diferencial arancelario entre el poroto y el aceite y la harina, generará una caída en el ingreso de divisas de u$s 860 millones. Así lo estimó el analista y consultor en agronegocios, Pablo Adreani, quien explicó que “con la eliminación del diferencial actual del 2% de las retenciones a las exportaciones, que surge de una retención del 33% en el poroto de soja y el 31 % en las retenciones al aceite y la harina de soja, la industria aceitera debe asumir un aumento en sus costos de elaboración de entre 9 y 11 u$s/ton”.
El impacto de reducir el diferencial arancelario
La pérdida en el diferencial de retenciones afecta la competitividad de uno de los sectores más competitivos de la Argentina, la agroindustria procesadora de soja.
Con estos números, la industria aceitera deberá bajar su precio de compra de la soja disponible y le pagará a los productores entre 9 y 11 u$s/ton menos que ahora. “Los principales perjudicados con el aumento en las retenciones de la harina de soja y el aceite de soja (del 31% al 33%) son los productores que verán reducidos sus ingresos en el orden de los u$s 400 millones anuales”, indicó Adreani.
Por otra parte, la baja a cero a las retenciones de los productos de las economías regionales tiene para el gobierno un lucro cesante, advirtió el especialista porque “dejan de ingresar dólares en concepto de las retenciones a la exportación de u$s 95 millones anuales”.
Por otra parte advirtió que “los actores del sector festejan la eliminación del diferencial arancelario de las exportaciones del complejo soja, sin analizar el impacto negativo en los márgenes de molienda de soja que la medida ocasiona”. Explicó que “la reducción en el volumen de molienda de soja, por márgenes de molienda negativos, podría ser superior a los 5 millones de toneladas, con un ingreso de divisas que se reduciría en u$s 2.260 millones”.
Esto se vería compensado pero parcialmente por un aumento adicional en las exportaciones de poroto de soja por un volumen estimado de 3 millones de toneladas. “Si esto ocurre, la única forma de competir con la oferta de soja de Brasil, que exporta 100 millones de toneladas de poroto de soja es bajando los precios FOB de exportación de soja Argentina”, indicó Adreani y detalló que de ese modo, el ingreso de divisas aumentaría en u$s1.401 millones.
Eso dejaría una caída en el saldo neto de ingreso de divisas por u$s 860 millones.
Teniendo en cuenta estos números, Adreani señaló que la información demuestra "el impacto negativo y el aumento de los costos de elaboración del aceite y la harina de soja, en el proceso de molienda, cuando se anula el diferencial del 2% entre los productos y subproductos resultantes de su elaboración”.
“La pérdida en el diferencial de retenciones afecta la competitividad de uno de los sectores más competitivos de la Argentina, la agroindustria procesadora de soja, y vuelve a colocar a nuestro país como benefactor de la exportación de commodities agrícolas en lugar de promover las exportaciones con mayor valor agregado“, concluyó el especialista.