El desarrollo sostenible es uno de los grandes desafíos de estos tiempos y el sector agropecuario tiene aún un largo camino por recorrer en ese sentido, pero si finalmente se anima a dar el salto y cambiar podría generar mejores negocios. Hoy el mundo —especialmente la Unión Europea— premia económicamente las buenas prácticas, la trazabilidad, la gestión de la empresa agropecuaria respetando ciertos estándares y en poco tiempo más, incluso, preferirá no comercializar con aquellos países que no cumplan con sus pautas enfocadas en la sostenibilidad.
El valor de la sostenibilidad en los negocios agropecuarios
Pacto Global Argentina cumplió 20 años. Hay programas para que las empresas y organizaciones modifiquen prácticas para alcanzar un futuro sostenible. El campo aún no se prende en esta tendencia con demanda global
Por Patricia Martino
En este marco se inscriben las acciones de la Red Argentina de Pacto Global. Buscan movilizar a empresas, instituciones y organizaciones a comprometerse con los 10 principios universales de las Naciones Unidas (ONU) y contribuir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible aprobados en la Asamblea General de las Naciones Unidas. El marco de los festejos por el 20º aniversario los máximos referentes de Pacto Global desembarcaron en Rosario para contar de primera mano a empresarios los programas disponibles para Argentina en esta iniciativa, que ya cuenta con 960 participantes, y traza el camino hacia un futuro sostenible, pero el sector agropecuario aún no toma tan en cuenta.
Desde Pacto Global Argentina consideran que estos encuentros son una gran oportunidad para reunir a la comunidad empresarial y a otros actores clave para colaborar, aprender y comprometerse con un futuro más sostenible para todos. En Rosario se habló sobre cómo estar listos para enfrentar los desafíos del mañana con acciones concretas y colaborativas.
Flavio Fuertes, coordinador de la Red Argentina del Pacto Global de Naciones Unidas, contó que durante el encuentro que se realizó en la ciudad se ratificó el interés dentro de la comunidad empresaria por la sostenibilidad, el desarrollo sostenible, lo que antes se llamaba responsabilidad social empresaria. “Volvemos a ratificar un interés de muchas organizaciones de abrazar este camino, de entender que su rol en la sociedad va más allá de generar negocios y que tienen una responsabilidad con el cuidado del ambiente, con el cuidado de los derechos humanos, con la integridad y sobre todo con el respeto también a las condiciones laborales. Tuvimos una audiencia muy variada en Rosario y también tuvimos paneles donde pudimos conversar, por ejemplo con dos CEOs de dos empresas como Milicic y Randstad en donde su presidentas mostraron justamente no sólo el compromiso y la convicción por parte de la alta dirección sino también como entienden que esto le genera valor al negocio ya sea desde la mitigación de costos, la reducción de riesgos o la construcción de cierta reputación corporativa. Todo eso les garantiza mantener su negocio en el largo plazo”, detalló.
Durante el evento de Pacto Global en Rosario también se habló de derechos humanos. “También ratificamos el interés de otros actores que forman parte del ecosistema empresarial como es el caso el Sindicato de Luz y Fuerza de Rosario que por ejemplo con todo su experiencia de empezar a implementar una política de igualdad de género hacia adentro del sindicato y en su diálogo permanente con la empresa pública de energía de Santa Fe. Además, contamos con la experiencia de La Segunda que a partir de su participación en Pacto Global aprobó una nueva política. En realidad lo más interesante en el caso de los dos ha sido cómo a partir de la aprobación de la política se introducen cambios en la organización”, indicó Fuertes.
A modo de conclusión, el referente de Pacto Global en Argentina consideró que “fue una muy buena jornada para compartir con resultados y experiencias y para ratificar que más allá del contexto que siempre en Argentina es problemático para hacer negocios, hay un conjunto de organizaciones empresariales importantes en el país que está pensando en la construcción de negocio en el largo plazo”.
La importancia de la propuesta de Pacto Global Argentina
Desde hace 20 años Pacto Global Red Argentina impulsa la agenda de sostenibilidad en el país y apuestan a que los negocios establezcan objetivos respetando los límites planetarios y que los derechos humanos sean una realidad para todas las personas. El 40% de las empresas argentinas ya mide su huella de carbono y las que no lo hacen manifiestan un interés concreto en avanzar en ese sentido. Más de 40 empresas ya incorporaron procesos de debida diligencia en derechos humanos en sus organizaciones. Más de 60 empresas participaron en los programas aceleradores de Pacto Global Argentina durante el último año.
Del total de las más de 900 participantes de Pacto Global, entre un 65% y 70% son empresas, y el resto organizaciones que no tienen lucro, cámaras empresariales, universidades, fundaciones, sindicatos, algunos gobiernos locales. Entre las empresas un 65 o 70% son empresas pequeñas y medianas, que tienen menos de 250 empleados.
Fuertes contó que “hay ciertos sectores de la actividad económica argentina que no están de un modo masivo participando de la iniciativa y eso es lo les llama la atención. El sector agropecuario es uno de ellos. “No vemos actividad vinculada con el sector del campo de nuestro país siendo un sector estratégico. Estamos viendo en ciertos mercados ya maduros como el de la Unión Europea directrices como lo que pide sobre trazabilidad para que los productos sean libres de deforestación. También la Unión Europea está reclamando a cualquier empresa que venda sus productos en la Unión Europea un informe del impacto en derechos humanos en la cadena de suministro. Vemos que nosotros comerciamos mucho con la Unión Europea, que vendemos mucho de nuestros productos que vienen del sector del campo, sin embargo la participación de ese sector de nuestra iniciativa prácticamente es nula”, resaltó.
Qué pasa en cada sector económico
El coordinador de la Red Argentina subrayó que “son contadas las excepciones” y detalló: “Uno ve a los cinco grandes exportadores de grano de la Argentina no están adheridos a Pacto Global, los cinco grandes productores de carne vacuna de la Argentina tampoco están adheridos al Pacto Global. Cuando uno ve los cinco productores de cerdo de la Argentina, aunque no se focaliza tanto en la Unión Europea es más hacia otros mercados, tampoco están ahí. Vemos adheridas a Pacto Global muchos del sector industrial, las industrias manufacturas de nuestro país, el sector de servicios está muy vinculado también, el sector financiero ya sea bancos o empresas aseguradoras. Diría que los tres sectores de actividad que más participan son la industria, el comercio y los servicios y dentro de servicios en particular los servicios financieros tanto bancos como aseguradoras”, indicó.
Al analizar porqué el campo no se suma a la propuesta, cuando en muchos casos hace las cosas bien y forma parte del complejo de actores que contribuye a la reducción de las emisiones y se adhiere a programas para la captura de carbono en el suelo, Fuertes explicó que “es un sector que ha estado bastante más alejado de esta temática durante mucho tiempo” ya que “es un sector en donde la agenda social presenta para muchos muchos problemas”.
“Hay trabajo forzoso, hay trabajo migratorio en condiciones laborales que no respetan las condiciones de trabajo decente. En muchos sectores del sector agrícola hay trabajo infantil también. Entonces esto significa, al momento de que adhiere a Pacto Global, empezar a tener ciertas conversaciones con estos actores que son difíciles, pero que en la integralidad del desarrollo sostenible son importantes ponerlos en la agenda. Saben que es un desafío adherirse a iniciativas de este tenor a nivel internacional porque hay que empezar a resolver algunas problemáticas que tienen una larga tradición en nuestro país lamentablemente, en nuestro país y en otros países de la región también, y entonces probablemente no esté la madurez suficiente en el sector empresarial para poner estos temas sobre la mesa”, consideró.
No obstante, Fuertes manifestó tener la esperanza de que el sector se sume y contó que están llevando adelante algunas experiencias piloto con el sector citrícola. “Con el apoyo Unión Europea están poniendo en marcha un proyecto entre el sector agrícola argentino, paraguayo y brasilero para el segundo semestre de este año donde lo que queremos justamente es recoger algunas buenas prácticas que vayan más allá de la cuestión ambiental, tener algunas buenas prácticas pero que también representen un impacto importante en términos de sus emisiones y que puedan entender que la sostenibilidad es también de su negocio. Tenemos la expectativa de que los próximos años este sector, sobre todo porque la Unión Europea está mandando directrices que son de cumplimiento obligatorio para aquellas empresas que quieran seguir comercializando con este mercado, puedan hacerlo y puedan mostrarlo. No solo es una cuestión de saber hacer sino también hacer saber a su comunidad stakeholders como la organización está cumpliendo con este tipo de compromisos y eso demanda un esfuerzo importante”, puntualizó.
El coordinador del Pacto Global en Argentina contó cómo están trabajando hoy en el país y las herramientas que brindan para facilitar el acercamiento de las empresas e instituciones al desarrollo sostenible. “Ya con 20 años de trayectoria pudimos entender que las organizaciones que se interesan en el desarrollo sostenible parten de puntos de partida muy diferentes. Hay organizaciones que llegan a Pacto Global con convencimiento pero siempre necesitamos que la alta dirección de organización esté convencida del compromiso que asume con el respeto estos días principios del Pacto Global, pero la manera de gestionar el negocio parte siempre de lugares muy distintos. hay empresas que están empezando con el tema, y empresas que ya tienen una persona encargada o tienen un comité. O sea que el punto de partida es muy distinto. Hemos desarrollado una experiencia de participante de Pacto Global que reconoce al menos como tres estadios y ofrecemos entonces distinto tipo de asistencia para las empresas en función del grado de madurez con que gestionan la sostenibilidad”, precisó.
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En ese sentido, señaló que si es una empresa líder se le brinda la oportunidad de poder gestionar algún tema en particular, que sea de interés para su industria y que sirva fundamentalmente para que otros actores de su sector también puedan incorporar buenas prácticas. “Entendemos que la acción colectiva es un elemento fundamental para cambiar las reglas del juego”, apuntó.
Si la empresa no es una empresa líder, está en un nivel de madurez más o menos avanzada, se le da la oportunidad de participar en los grupos de trabajo que son instancias de intercambio entre pares, multiactor, en donde se comparten buenas prácticas alrededor de economía circular, género, acción climática, integridad. En tanto, si la empresa recién se está iniciando -Fuertes resaltó- necesitan formar a sus recursos humanos, formar a sus equipos, formar a sus stakeholders en este tema y que lo que se le ofrecemos son instancias de capacitación, de formación, y participar de la academia virtual de sostenibilidad de Pacto Global.
A la medida de cada negocio
“No importa en qué momento del recorrido de la sostenibilidad estén las organizaciones, si están arrancando, si ya tiene una trayectoria y son líderes, pueden unirse a Pacto Global y justamente nosotros con distintas instancias, la academia, los cursos de formación, los grupos de trabajo, los programas aceleradores o al participar de nuestra red a nivel regional y global, todas las organizaciones pueden a la medida de su desarrollo organizacional mejorar su desempeño“, contó Fuertes y agregó como contraparte, sólo se le solicita a las organizaciones al final del período, una vez que están adheridas a Pacto Global el primer año y a partir de ahí todos los años, presentar un informe con el progreso que están haciendo con la implementación de los 10 principios y el impacto que esto tiene en las personas y en el Planeta.
Fuertes explicó que participar de Pacto Global que no tiene ningún costo para las pequeñas y medianas empresas, sólo están obligadas a pagar para participar de la iniciativa las empresas que facturan por encima de los 25 millones de dólares al año.
“Muchas veces cuando hablamos con una empresa pyme enseguida nos hace la referencia acerca de que no tiene recursos. Lo bueno es que nuestra red justamente se financia con contribuciones que hacen las empresas grandes de nuestro país y entonces lo que ofrecemos es todo un paquete de actividades a las empresas que facturan menos de 25 millones de dólares al año, que son realmente empresas pymes, para que puedan acceder a todo este paquete de recursos, los grupos de trabajo, los programas de formación, la asistencia técnica nuestra para que las empresas salgan con su primer reporte de sostenibilidad por ejemplo. Ahora estamos trabajando con 23 compañías de nuestro país y vamos a iniciar el mes que viene con 20 compañías de la provincia de San Juan con la asistencia técnica también de la agencia de inversiones de dicha provincia con lo cual este año ya vamos a tener por ejemplo 43 pymes dándole asistencia técnica para que puedan sacar su primer reporte del impacto económico, social y ambiental”, detalló fuertes e invitó a las empresas pequeñas y medianas a adherirse a Pacto Global.