Frente a los resultados adversos de las campañas anteriores, la demanda de seguro agrícola creció en la región, especialmente en las coberturas contra heladas. El incremento de la demanda llega también con novedades sobre la resolución de daños. Es que la tecnología facilita cada vez más la tarea para que los productores agropecuarios puedan acceder a la reparación del daño más rápidamente y de forma precisa.
Crece la demanda de seguro agrícola para la nueva campaña
Las suscripciones contra heladas coparon la campaña de granos fina. La contratación creció en los últimos ciclos al ritmo del clima
Carlos Comas, gerente de Riesgos Agropecuarios y Forestales de La Segunda Seguros, señaló que la experiencia de las últimas tres campañas, en las que los productores enfrentaron pérdidas importantes por fenómenos climáticos, provocó un aumento considerable en la contratación de seguros.
“Hoy, la demanda de cobertura contra heladas es enorme, tanto es así que hace en 20 días dejamos de comercializar esta cobertura para los cultivos de invierno como trigo y cebada porque alcanzamos nuestra capacidad máxima”, reseñó.
En total, La Segunda Seguros aseguró 400.000 hectáreas con cobertura de heladas, un número que se alcanzó en tiempo récord. “En otros años la contratación se extendía hasta los últimos días de la campaña, pero ahora la percepción de riesgo es tan alta que los productores no quisieron esperar”, explicó Coma. Esta situación refleja un cambio en la mentalidad de los agricultores, que buscan proteger sus cultivos frente a eventos climáticos cada vez más impredecibles.
Además de las coberturas contra heladas, la demanda de seguros contra granizo sigue en aumento. La compañía ya ha asegurado 800.000 hectáreas para la cosecha fina y espera alcanzar un récord histórico de un millón de hectáreas aseguradas, lo que representaría un crecimiento del 15 al 20% en comparación con la campaña anterior.
De cara a la campaña de gruesa, las expectativas son moderadamente optimistas. Los pronósticos climáticos indican la posibilidad de un año Niña, aunque los expertos sugieren que, de producirse, sería de baja intensidad. Esto permitiría condiciones de lluvia más cercanas a la normalidad, lo que genera cierto alivio entre los productores y las aseguradoras. Coma adelantó que La Segunda espera suscribir alrededor de 3 millones de hectáreas para la campaña de gruesa, lo que le permitirá mantener su liderazgo en el sector agropecuario.
El clima mete presión
El manejo del riesgo sigue siendo un desafío clave para la compañía. “Como primera compañía de seguros en cantidad de hectáreas aseguradas en Argentina tenemos la capacidad de asumir riesgos que otras aseguradoras no pueden. Gracias al apoyo de reaseguradores internacionales, podemos ofrecer soluciones al mercado en situaciones críticas, como lo fue la alta demanda de cobertura contra heladas este año”, explicó.
El gerente de Riesgos Agropecuarios y Forestales de La Segunda Seguros, evaluó el impacto de la última campaña agrícola con una frase contundente: “Cada 100 pesos que cobramos, tuvimos que pagar 200”. Refleja la magnitud de las pérdidas ocasionadas por las adversidades climáticas que golpearon los cultivos de trigo y cebada durante el ciclo 2023/2024. La alta siniestralidad y las severas condiciones meteorológicas marcaron la temporada, dejando lecciones y desafíos para la nueva campaña agrícola.
“Las heladas fueron muy fuertes y los cultivos tras tantos años de sequía no se encontraban en las mejores condiciones para resistirlas”, explicó. El resultado fue devastador, con el 60% de los daños atribuidos a las heladas y el 40% restante al granizo, lo que dejó un panorama crítico para los productores.
Innovación en la gestión
Un aspecto fundamental que destaca Coma es el rol de la tecnología en la gestión del riesgo. La Segunda ha implementado plataformas innovadoras que permiten evaluar y tasar los siniestros de manera más eficiente y precisa. “Hoy nuestros ingenieros agrónomos ya no necesitan llegar al campo para ver la realidad. Con la información satelital, podemos identificar los daños con mucha anticipación y precisión. Esto nos permite optimizar el tiempo y brindar una mejor atención”, señaló Comas.
Estas nuevas herramientas no solo permiten detectar el tipo de daño en los cultivos, sino también determinar con exactitud la cantidad de hectáreas afectadas. “Es un cambio significativo que da mucha más transparencia al proceso de tasación y mejora la confianza del productor en el seguro”, añadió.
La tecnología también está transformando otros aspectos del seguro agropecuario, como las coberturas para silobolsas. Antes, era necesario enviar un inspector al campo para relevar el estado de los silos y cotizar el seguro. Hoy, gracias a un sistema de identificación digital y a la tecnología satelital, los productores pueden asegurar sus silos en 24 horas, desde cualquier lugar y de forma remota. Esta solución no solo agiliza el proceso, sino que también permite a los productores utilizar sus silobolsas como garantía en operaciones de crédito.
La innovación tecnológica es el camino para el futuro del seguro agropecuario en Argentina. “Las soluciones tecnológicas están transformando el sector, y en La Segunda estamos comprometidos con implementar estas herramientas para mejorar nuestra oferta y hacer más eficiente la gestión del riesgo”, afirmó Comas.