La semana pasada se largó oficialmente la campaña comercial 2025/26 de trigo en argentina, un ciclo que desde antes de la siembra promete quedar en la historia como una de las campañas más importantes en nuestro país. “Las excelentes condiciones previas y las inversiones en tecnología están dejando rindes extraordinarios a medida que va avanzando la cosecha”, subrayó un informe del departamento de estudios económicos de la Bolsa de Comercio Rosario. Los testimonios hablan de de rindes astronómicos que llegan a superar los 100 qq/ha y la Guía Estratégica para el Agro (GEA) estima que el rendimiento promedio del trigo en la Región Núcleo podría llegar a 60 qq/ha.
Trigo: una campaña histórica que se siente en los precios
La cosecha avanza con rindes sorprendentes. El volumen y la presión logística hizo caer los precios. La proteína también hace diferencia. El inusual dinamismo de las exportaciones de soja mete presión en los puertos
La cosecha de trigo 2025/26 avanza y será una de las más grandes de la historia.
El estudio elaborado por Franco Pennino, Matías Contardi y Emilce Terré invita a poner estos rendimientos en perspectiva histórica, para tomar nota de su dimensión. Según la información oficial de la Secretaría de Agricultura, el mayor rendimiento registrado en una serie que inicia en la campaña 1969/70 corresponde al departamento de Monte (Buenos Aires), con 71,86 qq/ha en el ciclo 2009/10. A lo largo de cincuenta y seis campañas y para cada uno de los departamentos agrícolas del país, solo en tres ocasiones al menos uno de ellos logró superar los 60 qq/ha.
Efecto precios
Bajo esta performance nunca vista, con el 47% de avance de cosecha a nivel nacional, las descargas de trigo en puertos del Gran Rosario alcanzaron máximos históricos, acumulando 1,98 millones de toneladas en noviembre, el doble que el promedio del último quinquenio y un 80% arriba de la media de la última década. Sin embargo, no solo es trigo lo que entra a los puertos, sino que la soja sumó otros 2,7 Mt, superando el ritmo de ingreso de los últimos diez años.
Con la llegada del trigo nuevo al mercado, los precios disponibles se resintieron fuertemente. El cereal paso de promediar u$s 182 por tonelada durante los primeros veinte días de noviembre, a tocar piso en u$s 161 por tonelada y estabilizarse entre los u$s 165 y u$s 171 por tonelada en la semana. Comparando con el histórico y actualizando las cotizaciones en pesos según el efecto de la inflación, hoy el precio pizarra por trigo en Rosario es el más bajo desde diciembre del 2017.
“Que el actual nivel de precios por trigo este en mínimos de ocho años, en una gran proporción es explicado por la impresionante oferta esperada para esta campaña y el contexto de elevados suministros globales”, señala el trabajo. Sin embargo, aclara que “hay dos factores determinantes que se están conjugando en el corto plazo para agudizar aún más la tendencia bajista: la presión logística y los diferenciales de precio por nivel de proteína”.
Logística y proteína
Por el lado del flujo, a la estacional presión de cosecha de trigo hay que sumarle el efecto de la guerra comercial USA -China y sus consecuencias en los envíos de soja hacia el exterior. Este escenario deriva en importantes flujos de mercadería hacia puerto y convierte a la logística en una variable clave para la determinación de precios. En un contexto de elevada producción y necesidad de entrega de mercadería, el valor del “cupo” empieza a pesar considerablemente y se observan diferencias entre las cotizaciones para contratos con entrega inmediata y contractuales (dentro de los próximos 30 días) de hasta un 4% en el precio, para un mismo día y con descarga en el Gran Rosario.
Por el lado de la proteína, los precios de exportación llegan a distanciarse en u$s 10 por tonelada, comparando un mismo mes de entrega. El FOB de diciembre 2025 para embarcar desde el Up-River se negocia en u$s 195 por tonelada para trigo con un nivel de proteína del 10,5% y en u$s 205 por tonelada con un nivel de proteína del 11,5%. Inclusive se han llegado a ver ofertas vendedoras para trigo con proteína 12,5% en diciembre por u$s 210 por tonelada.
El descuento en proteína se traslada hacia el mercado local, combinándose con los descuentos por prioridad de entrega, lo que explica la caída abrupta de las cotizaciones estas últimas semanas.
Mercado internacional
En el plano internacional, las condiciones climáticas en el Hemisferio Sur se presentan excepcionales. Australia, el mayor proveedor de trigo a esta etapa del año, presenta volúmenes de oferta sorprendentes. De acuerdo con Abares, una agencia dependiente de su Departamento de Agricultura, las estimaciones de cosecha 2025/26 la posicionan 29% por encima del promedio de los últimos diez años y con perspectivas a ser tercera más grande de su historia.
La historia para los volúmenes en Argentina es similar a la de Australia, aunque en la dimensión de precios existen grandes diferencias. A pesar de estar realizando sus labores en paralelo, el precio FOB del gigante de Oceanía se consolida como el más alto entre los principales exportadores mundiales, mientras que el precio de exportación argentino es el más bajo del grupo. La distancia a los grandes centros de consumo de Asia, por ejemplo, afecta el valor al cual efectivamente se comercializa el grano en puerto de destino (CIF o C&F). Así todo, hay que remontarse a enero de 2020 para encontrar valores tan bajos para el FOB local.
El factor soja
El informe analiza tambión el factor soja en el precio del trigo. Apunta que durante noviembre se embarcaron dos millones de toneladas de poroto, récord para el mes y un 41% por encima del máximo anterior del 2019. En lo que va de la campaña, las exportaciones a llegan a 11,3 millones de toneladas, máximos en una década y el tercer valor más alto de la historia para esta altura del año. Este ciclo está rompiendo completamente con la estacionalidad habitual de los embarques de la oleaginosa, siendo el efecto de la guerra comercial el principal culpable de ello.
“Sin embargo, lo que hace aún más particular a esta campaña, es que el ritmo de exportaciones de derivados corre igual o incluso más rápido que el de poroto”, advierten los economistas de la Bolsa. A la tercer mejor marca exportadora de soja, hay que sumarle la segunda mejor de la historia en embarques de aceites, con 5,7 millones de toneladas, a solo 100.000 toneladas del récord de 2021, y 20,8 millones de toneladas embarcadas de harina, un 5% por encima del promedio para la última década. Fenomenal absorción externa que se materializa en el nivel de comercialización del mercado argentino, con 40 millones de toneladas comprometidas hasta ahora, el 81% de la producción y 20% por encima del año pasado a esta altura.
En esto deriva el hecho de que el ingreso de toneladas a puertos se mantenga en niveles tan elevados a esta altura del año. La necesidad de procesar toneladas y cumplir con contratos de derivados sumado a los embarques pactados de poroto, “ocupan espacio” en los puertos y se mezclan con los envíos de trigo, intensificando aún más los efectos de la presión de cosecha sobre la pizarra. La programación de embarques para la primera mitad de diciembre es de 900.000 toneladas de soja, cuando el récord para todo el mes lo tiene el año 2018 con 873.000 toneladas.
A contramano del precio del trigo, las cotizaciones de soja aumentaronen virtud de la menor oferta disponible y la necesidad de originación, lo que mantiene el precio de la pizarra promediando u$s 346/t a pesar de que Chicago cayó cayendo un 3,3% desde que alcanzó máximos el 17 de noviembre.
El secretario del Tesoro Norteamericano, Scott Bessent, declaró el miércoles pasado que China cumpliría con la parte de su acuerdo de originar 12 millones de toneladas de soja en el corto plazo, con una pequeña salvedad, en vez de completar ese volumen a fines de diciembre, ahora la fecha límite se corrió hacia fines de febrero del 2026.










